Las várices son una condición médica que afecta a muchas personas en todo el mundo. Estas venas dilatadas y torcidas, que suelen aparecer en las piernas, pueden ser más que una preocupación estética.

Se trata de venas inflamadas y retorcidas que pueden ser visibles a través de la piel. A menudo se presentan como protuberancias de color azul o violeta y aunque pueden aparecer en diversas partes del cuerpo, son más comunes en las piernas y los tobillos.

Esta condición se produce debido a un mal funcionamiento de las válvulas venosas, que normalmente ayudan a que la sangre fluya en una sola dirección hacia el corazón. Cuando estas válvulas se debilitan o dañan, la sangre puede acumularse en las venas, lo que provoca su dilatación y la formación de várices.

Si bien las várices pueden ser principalmente una preocupación estética, también pueden causar síntomas incómodos y potencialmente más graves. Las personas con esta afección a menudo pueden experimentar dolor, sensación de pesadez, picazón y calambres en las piernas.

Las molestias por várices pueden aliviarse con el consumo de algunas plantas medicinales. | Foto: Getty Images

De igual manera, las piernas pueden hincharse debido a la acumulación de sangre en las venas afectadas y en casos severos, las várices pueden causar úlceras cutáneas, que son heridas abiertas en la piel que pueden ser difíciles de tratar. Las várices pueden aumentar el riesgo de coágulos sanguíneos, los cuales suelen ser peligrosos si se desplazan hacia otras partes del cuerpo.

Para prevenir estas situaciones molestas, además del uso de un calzado cómodo y posturas que faciliten el descanso y la adecuada circulación sanguínea, la alimentación es un factor relevante y donde el sodio puede agravar la condición.

El sodio, presente en ingredientes de uso frecuente como la sal de mesa, es un mineral esencial para el cuerpo, pero un consumo excesivo puede tener efectos negativos, especialmente en personas propensas a las várices.

El sodio contribuye a la retención de líquidos, lo que puede aumentar la hinchazón en las piernas y agravar los síntomas de las várices, como el dolor y la incomodidad. Dicha retención puede ejercer presión adicional sobre las venas ya debilitadas, exacerbando la dilatación venosa y los síntomas asociados. De allí la importancia de reducir el consumo de alimentos con altas cantidades de este compuesto.

Uno de ellos, y es que es ampliamente conocido en la gastronomía mundial, son las papas fritas. Especialmente en las versiones comerciales o procesadas, estas papas tienden a ser altas en sodio ya que durante su proceso de fabricación se agrega sal y otros condimentos para realzar su sabor.

El sodio también se utiliza como agente conservante en algunos alimentos procesados y ayuda a extender la vida útil de los productos y prevenir el crecimiento de microorganismos.

papas fritas | Foto: bhofack2

Otro de los alimentos es el arroz blanco, ampliamente consumido en muchas culturas alrededor del mundo como un ingrediente versátil que puede ser utilizado en una variedad de platos, desde guarniciones hasta platos principales y postres.

Por sí solo el arroz no es naturalmente alto en sodio, sin embargo, en algunos platos como fritos o comidas preparadas, puede contener sodio en niveles más altos debido al uso de sal u otros condimentos durante la cocción.

Para reemplazar el uso de ingredientes con altos niveles de sodio en las comidas se recomienda el uso por ejemplo de hierbas aromáticas como el perejil, el cilantro, el orégano, el tomillo, el romero y la albahaca, las cuales pueden proporcionar un sabor delicioso y complejo.

Las carnes procesadas y embutidos tienen altos contenidos de sodio. | Foto: Pixabay

De igual manera, las especias como el comino, el pimentón, la cúrcuma, el jengibre, la canela y el curry pueden dar un toque único a las recetas. Experimentar con diferentes combinaciones puede ayudar a encontrar sabores favoritos.

A medida que el gusto y el organismo se acostumbran a estos sabores naturales y variados, es posible descubrir una mayor apreciación por los matices de los alimentos frescos y evitar el uso del sodio.