La herencia de la gastronomía maya es una rica y diversa tradición culinaria que ha perdurado a lo largo de los siglos en la región mesoamericana. Y ha sido tal su influencia que aún hoy muchos siguen recurriendo a su sabiduría para aprovechar los beneficios de su alimentación.
Uno de ellos es la espinaca maya, el vegetal que frece una amplia gama de beneficios para la salud, al ser una excelente fuente rica en vitaminas y minerales, incluyendo vitamina A, vitamina C, vitamina K, ácido fólico, hierro, calcio, magnesio y potasio. Esta, según se dice, mejora la salud mental y ayuda a controlar el estrés, un problema común entre la población.
Entre sus beneficios, también destaca que, la espinaca es rica en luteína y zeaxantina, dos antioxidantes que se ha demostrado que promueven la salud ocular y pueden reducir el riesgo de enfermedades oculares relacionadas con la edad, como la degeneración macular. No obstante, este alimento también es bajo en grasas saturadas y colesterol, y rico en nutrientes como el potasio y el magnesio, que son importantes para mantener la presión arterial bajo control y promover la salud cardiovascular en general.
Ahora bien, otro alimento ancestral que los mayas solían consumir para mejorar la salud es el chía, estas semillas son ricas en nutrientes como ácidos grasos omega-3, proteínas, fibra y antioxidantes. Estos ácidos grasos son conocidos por su capacidad para reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol “malo”) y triglicéridos, lo que ayuda a mejorar la salud cardiovascular y reducir el riesgo de enfermedades cardíacas.
Además, tienen la capacidad única de absorber agua y formar un gel en el estómago, lo que puede ayudar a promover la sensación de saciedad y regular el tránsito intestinal.
Para consumir chía, no hay una regla estricta. Sin embargo, muchas personas optan por incluirla en su desayuno, ya sea agregándola a batidos, yogur, cereales o incluso como parte de un pudding de chía.
Consumirla en la mañana puede proporcionar un impulso energético inicial y ayudar a mantener la saciedad durante el día debido a su alto contenido de fibra. Sin embargo, puede consumirla en cualquier momento del día que mejor se adapte a tus hábitos y necesidades dietéticas.
RECETAS CON ESPINACA
Incluir espinaca en su desayuno es una excelente manera de agregar nutrientes adicionales a su primera comida del día. Aquí tiene algunas ideas creativas para incorporar espinaca en su desayuno:
- Batido verde: Agregue un puñado de espinacas frescas a su batido matutino. Combínalo con frutas como plátanos, piña, manzanas o bayas, junto con un poco de yogur o leche (puede ser láctea o vegetal) para obtener un batido delicioso y nutritivo.
- Revuelto de huevo con espinacas: Saltee espinacas frescas en una sartén con un poco de aceite de oliva y luego agregue huevos batidos. Cocine hasta que los huevos estén cocidos y las espinacas estén tiernas. Puede agregar otros ingredientes como tomates, champiñones o queso para darle más sabor.
- Tortillas o omelets con espinacas: Incorpore espinacas picadas en sus tortillas o omelets. Mezcle las espinacas con los huevos batidos antes de cocinarlos en la sartén. Puede agregar también otras verduras, como pimientos o cebollas, para obtener más variedad de sabores y texturas.
- Desayuno en capas: Prepare un desayuno en capas con yogur, frutas frescas, granola y espinacas. Alterna capas de yogur con espinacas frescas picadas y frutas en un tazón, y luego agrega granola encima para obtener un desayuno nutritivo y lleno de sabor.
- Tostadas con aguacate y espinacas: Unte aguacate en tostadas integrales y luego cubra con espinacas frescas y un huevo pochado o revuelto. Esta es una opción deliciosa y saludable para un desayuno abundante.