Los triglicéridos son el tipo más común de grasa en el cuerpo. Provienen de las calorías adicionales que el organismo no necesita de inmediato y los almacena en las células de grasa. “Cuando el cuerpo necesita energía, libera los triglicéridos y las partículas de lipoproteína de muy baja densidad llevan los triglicéridos a los tejidos”, explica el portal Medline Plus.
Aunque cumplen una función importante en el organismo, es necesario mantener los triglicéridos al margen, pues cuando su nivel se eleva puede aumentar el riesgo de enfermedades del corazón, como la enfermedad de las arterias coronarias.
El nivel de triglicéridos puede ser alto por diferentes causas, como ingerir regularmente más calorías de las que el cuerpo gasta, fumar o consumir alcohol en exceso o tener sobrepeso. Sin embargo, no solo los hábitos son factores de riesgo para los triglicéridos altos, sino que también medicamentos, trastornos genéticos o enfermedades pueden disparar este índice.
De acuerdo con los expertos, es posible llegar a reducir los triglicéridos con cambios en el estilo de vida, como controlar el peso, limitar el consumo de azúcar y alimentos refinados, evitar el alcohol y el cigarrillo, reemplazar las grasas saturadas por grasas más saludables y llevar una dieta equilibrada.
Existe una variedad de alimentos importantes para mantener los triglicéridos en un nivel sano, pero entre estos tienen especial relevancia los alimentos ricos en ácidos grasos omega 3. Los ácidos grasos poliinsaturados tienen diversos beneficios para el corazón, así como para la circulación sanguínea, pero no son producidos por el cuerpo, por lo que deben obtenerse de la dieta.
Alimentos como el pescado azul (sardinas, boquerones, atún, salmón), los frutos secos (nueces, almendras o pistachos) o el aceite de oliva extravirgen son ricos en estos ácidos grados, por lo que los especialistas en medicina y nutrición recomiendan su consumo para el tratamiento de la hipertrigliceridemia, el nombre con el que se conoce el nivel elevado de triglicéridos en la sangre.
Para la población general, es importante incluir en la dieta alimentos ricos en omega 3, que ayudan a prevenir la aparición de eventos cardiovasculares. Entre las recomendaciones nutricionales para evitar que el nivel de triglicéridos se dispare se destacan otros alimentos amigos del corazón: por ejemplo, vegetales como el brócoli, la col rizada, las espinacas, la calabaza, la coliflor o las coles de bruselas.
Las legumbres también son saludables para cuidar los triglicéridos y el corazón, gracias a su bajo contenido de grasas y alto aporte de proteínas vegetales, hidratos de carbono complejos y fibra soluble. En cuanto a los hábitos de consumo, los expertos recomiendan incluir las legumbres en varias comidas por semana, además de incluir alrededor de cinco raciones de frutas y verduras al día, pues estas aportan fibra y antioxidantes naturales.
Por el contrario, es clave limitar el consumo de algunos alimentos para que los triglicéridos no alcancen niveles de riesgo. Alimentos con grasas saturadas, como las carnes rojas y embutidos, se pueden sustituir por carnes blancas como el pollo. Lo mismo se recomienda con el azúcar, la miel, las bebidas azucaradas y los refrescos.
¿Cuál es el nivel normal de triglicéridos?
Un simple análisis de sangre puede revelar si los triglicéridos están dentro de un rango saludable:
- Normal: menos de 150 miligramos por decilitro (mg/dl), o menos de 1.7 milimoles por litro (mmol/l)
- Límite: 150 a 199 mg/dl (1,8 a 2,2 mmol/l)
- Alto: 200 a 499 mg/dl (2,3 a 5,6 mmol/L)
- Muy alto: 500 mg/dl o más (5.7 mmol/l o más)
Cuando los niveles de triglicéridos superan estas cifras, aumenta el riesgo de problemas cardiovasculares. Los expertos señalan que los niveles elevados de triglicéridos se relacionan con el estrechamiento de las arterias coronarias, lo que dificulta el flujo sanguíneo y puede provocar angina de pecho o un infarto de miocardio. Además, se asocian con el desarrollo de otras patologías como la pancreatitis, la esteatosis hepática (hígado graso) o el ictus.