La miel es una sustancia natural producida por las abejas, que ha sido usada por las personas de múltiples formas como endulzante, componente de algunas mascarillas faciales y alimento nutritivo.
Además, esta sustancia que contiene una variedad de nutrientes, incluyendo antioxidantes y compuestos antiinflamatorios, puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud cardiovascular.
Además, la miel contiene flavonoides y ácidos fenólicos que pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL («malo») y aumentar los niveles de colesterol HDL («bueno») en el cuerpo.
Otros beneficios de la miel
- Regula el azúcar en la sangre: aunque la miel es un alimento de sabor dulce, ayuda a balancear el nivel de azúcar en la sangre. Esto se debe a que posee un equilibrio de fructosa y glucosa. De acuerdo con la nutricionista Bárbara Saldaña, en entrevista para el medio argentino Clarín, la miel contribuye a mejorar el funcionamiento de los órganos y tejidos esenciales.
- Ayuda al hígado: la miel natural facilita la producción de glucógeno en el hígado, una reserva natural que se genera para cuando el cuerpo lo necesite. Según la experta, es bueno comer miel en el desayuno y en la comida, pero es importante consumirla luego de realizar ejercicio porque ayuda a recuperar la energía que se pierde durante la actividad física.
- Beneficia el sueño: el azúcar natural que contiene la miel ayuda a producir una pequeña secreción de insulina y es gracias a esta hormona que se permite la creación de la melatonina, la hormona encargada de regular el sueño.
- Reduce el estreñimiento: gracias al alto contenido de fructooligosacáridos (FOS), la miel reduce el estreñimiento. Esto se debe a que cuando el oligosacárido llega al colon, el componente se comporta como una fibra vegetal, captando el agua y aumentando de esta forma el volumen de las heces. La miel puede generar un efecto laxante suave, siendo también alimento de las bacterias necesarias pertenecientes al colon.
- Reduce el estrés metabólico: este beneficio de la miel está relacionado con la energía que inyecta, pues el estrés metabólico se produce cuando el cerebro piensa que está en peligro de quedarse sin energía.
- Mejora la memoria: un estudio realizado en 2014 por el departamento de biología molecular de la Universidad Jahangirnagar de Bangladesh, reveló que este alimento favorece la conexión neuronal.
- Mejora la función cerebral: Según explicó la nutricionista Bárbara Saldaña, la miel “beneficia a deportistas, niños en crecimiento, adultos mayores, personas con trabajos forzados o que tienen carga intelectual extra, ya que aporta una dosis adicional de energía que se consume rápida y fácilmente”.
De todos modos, antes de consumir la miel y utilizarla como remedio natural, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guie el proceso e indique que es lo más adecuado para cada persona.
Cómo consumirla
Cómo consumir la miel: una cucharada sopera es suficiente para obtener sus nutrientes, la mejor manera de tomarla es con agua caliente o tibia. Para prepararla debe seguir los siguientes pasos:
Agrega una cucharada de miel a unos 250 ml de agua caliente o tibia, justo antes de que empiece a hervir.
Fíjese que se derretirá fácilmente.
Después, déjela enfriar un poco antes de disfrutarla.
Para obtener mejores resultados, es recomendable no comer nada al menos por media hora.