Uno de los alimentos que ha comenzado a ganar mayores adeptos por su grandes beneficios para la salud es el tofu o queso de soja.
La soja es la legumbre más consumida a nivel mundial, superando a las lentejas y garbanzos, esto a que es muy tradicional para la mitad del mundo, especialmente, en los países asiáticos, donde este producto constituye una de las bases de la alimentación. Además, la soja es la legumbre con mayor cantidad y calidad de proteínas.
Valor nutricional de la soja o tofu
Este es el valor nutricional del tofu por cada 100 gramos
- Calorías: 76 kcal
- Proteínas: 8 g
- Grasas: 4,8 g
- Hidratos de carbono: 1,9 g
- Fibra: 0,3 g
El tofu es un alimento muy consumido debido a que es un excelente sustituto de la carne y tiene la ventaja de que posee menos graso y su producción tiene muchos menos costes, tanto económicos como ambiental.
La soja también es un alimento muy rico en vitaminas y minerales, una ración habitual cubre un tercio de las necesidades diarias de calcio y hierro. De igual manera, aporta una buena cantidad de vitamina del grupo B, esenciales para el sistema nervioso.
Los expertos en nutrición recomiendan la ingesta de tofu ya que ayuda a mantener los niveles de glucosa en diabéticos. En un estudio realizado a un gran grupo de mujeres chinas, se comprobó que el consumo de soja redujo en un 66% ka excreción de glucosa por la orina.
El consumo de este alimento también ayuda a reducir las posibilidades de sufrir una enfermedad cardiaca. Si bien el consumo de una dieta baja en grasas saturadas y colesterol se ha relacionado con un riesgo reducido de enfermedad cardíaca, comer 25 gramos de proteína de soja al día puede reducir el riesgo de dicha enfermedad, según la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos).
“Creo que la mayoría de las personas podrían beneficiarse de añadir soja en su dieta. Es una fuente de proteína de origen vegetal que se adapta a los sabores del plato, es baja en grasas saturadas y no contiene colesterol”, considera Kailey Proctor, nutricionista del Hospital St. Joseph en el condado de Orange, California (EE. UU.).