La salvia es una planta medicinal a la que se le atribuyen una serie de beneficios para el organismo, como propiedades antiinflamatorias, antiespasmódicas, antisépticas, analgésicas, expectorantes, relajantes y antibióticas.
En concreto, gracias a sus propiedades antiespasmódicas, ayuda a aliviar los calambres estomacales y reduce los gases intestinales. Por esta razón, se recomienda preparar una infusión de salvia después de la hora de comer, o una vez que aparezcan los dolores en el estómago, según el portal Mejor con Salud.
También, según revista española ¡Hola!, mascar hojas de salvia es bueno para la salud bucal, pues evita la halitosis y limpia los dientes. Sin embargo, el cuidado bucal debe estar acompañado de una buena limpieza dental como cepillarse los dientes mínimo dos veces al día con un cepillo de cerdas suaves y pasta dental con fluoruro, y usar hilo dental todos los días.
Otra de las propiedades de la salvia es que en infusión permite la relajación muscular. Se ha observado que contribuye a combatir el insomnio, a menudo empleándose junto a la manzanilla, y parece ayudar a rebajar el nivel de ansiedad pese a ser a su vez vigorizante.
Adicionalmente, ayuda a aliviar el picor y los dolores de las picaduras de insectos debido a sus efectos antisépticos. Basta con frotar algunas hojas frescas en la llaga para calmar los dolores y la picazón.
Finalmente, esta planta es rica en vitaminas A y C y por tal razón es buena para fortalecer el sistema inmunitario, pues este es una red compleja de células, tejidos, órganos y las sustancias que estos producen, y que ayudan al cuerpo a combatir infecciones y otras enfermedades, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Té de salvia
Modo de preparación:
- Colocar 2 cucharadas de hojas secas de salvia en 250 ml de agua hirviendo y dejar reposar durante 10 minutos.
- Se recomienda tomar hasta 2 veces al día.