La cebolla es una hortaliza de origen asiático ampliamente utilizada para diferentes preparaciones. Gracias a su gama de colores, formas, tamaños y usos, la cebolla puede utilizarse en distintas formas, tanto cocinada como cruda. Aunque se destaca por el sabor que le aporta a las comidas, también cuenta con distintas propiedades medicinales.
Entre las múltiples variedades de esta hortaliza se encuentra la cebolla morada, ideal para acompañar salsas, ensaladas y cualquier variedad de blancas. Si se compara con la cebolla blanca, la morada tiene mayores beneficios para la salud por sus altos niveles de antioxidantes.
La cebolla morada, caracterizada por su tono vibrante y su sabor único, tiene una dulzura más pronunciada en comparación con su contraparte blanca. Además, su nivel de picante es más suave, lo que la convierte en una opción ideal para comer cruda, ya sea en ensaladas o sándwiches, sin generar lágrimas. Asimismo, su color intenso la convierte en una elección popular para agregar un toque visual a los platos.
Por la suavidad de su sabor, la cebolla morada también se utiliza cruda como acompañamiento en ensaladas, guacamole y otras salsas. Más allá de la diferencia en su sabor, son muchos los beneficios que tiene la cebolla morada para la salud, pues es rica en antocianinas, antioxidantes que contribuyen a la salud cardiovascular y a la prevención de enfermedades crónicas.
Se ha descubierto que la cebolla morada puede desplegar propiedades que ayudan a regular los niveles de azúcar en el cuerpo, convirtiéndose en un aliado valioso para quienes buscan combatir la diabetes y mantener una salud óptima.
Uno de los compuestos clave presentes en esta variedad de cebolla es el alil propilo disulfuro, un compuesto de azufre que ha demostrado ser efectivo para aumentar la producción de insulina en el cuerpo. La insulina es una hormona esencial que regula los niveles de glucosa en la sangre, y su deficiencia o resistencia está relacionada con la diabetes tipo 2. Estos son otros beneficios del consumo de este alimento:
- Es un alimento rico en antioxidantes gracias a las antocianinas (los pigmentos responsables de su color). Debido a estas características, son buenas para prevenir enfermedades del corazón y ciertos tipos de cáncer, como también para preservar la memoria, cuidar el tacto urinario y retrasar el proceso de envejecimiento celular.
- La cebolla morada es antihipertensiva, lo que significa que ayuda a reducir los niveles de hipertensión, por su alto contenido de quercetina, un pigmento vegetal con efectos antioxidantes y antiinflamatorios.
- Gracias a este último componente, también se dice que la cebolla morada es buena para prevenir tumores malignos, tiene efecto antiinflamatorio, antialérgico y favorece la circulación sanguínea. Precisamente esa es la razón por la que se utiliza como terapia para enfermedades cardiovasculares, cataratas por diabetes e inflamaciones.
- La cebolla morada es reconocida como un remedio natural para regular los niveles de glucosa en sangre para aquellas personas que padecen diabetes, pero también evita la osteoporosis al aumentar la densidad de los huesos.
- Ayuda a realizar la digestión y combatir el estreñimiento, gracias a su rico contenido en quercetina. Por esa misma razón, es buena para el aparato digestivo en general y para el buen desarrollo de las funciones de órganos como el páncreas, el hígado y la vesícula.
- Por otro lado, este tipo de cebolla es importante para el sistema inmunológico. Es rica en compuestos azufrados que forman parte de su aceite esencial, que elevan la eficacia defensiva y otorgan propiedades bactericidas y fungicidas que ayudan a eliminar muchos virus.
- Además, la cebolla tiene gran poder cicatrizante y emoliente, por lo que puede utilizarse de forma tópica para disminuir las arrugas de la cara, eliminar el acné, conservar el cabello y desinfectar heridas, entre otras.
- Por último, es uno de los alimentos más reconocidos popularmente para mejorar resfriados, gripes, catarros, bronquitis y congestiones nasales.