La desconcentración es un fenómeno común que afecta a personas de todas las edades en diversos contextos, ya sea el trabajo, os estudios o la vida diaria.

Esto se debe al tener muchas tareas por realizar y no priorizarlas, además de la era digital, que ha traído consigo innumerables distracciones: notificaciones constantes en dispositivos móviles, múltiples pestañas abiertas en navegadores web y la presión de estar siempre conectado.

Pese a que las personas siempre están en la constante búsqueda de mejorar sus esfuerzos y lograr días más productivos, han señalado que cada vez hay una mayor disminución en la capacidad de concentración y a menudo eso resulta en una productiva más baja y niveles de estrés más altos.

Es importante mencionar que el estrés, la falta de sueño y problemas en la alimentación aumentan estos índices de problemas en concentración.

Cabe señalar que una de las poblaciones que presenta mayores problemas en cuanto a la concentración son los adultos mayores, ya que, conforme al paso de los años, se comienzan a olvidar algunos detalles y aumenta la distracción.

Sin embargo, expertos en la salud indican que existen algunas plantas que ayudan a mejorar estos niveles de concentración al consumirlos en un té, de manera recurrente.

Estos son las infusiones que ayudan a mejorar la concentración

Té de romero: debido a sus compuestos antioxidantes y antiinflamatorios que pueden ayudar a proteger las células cerebrales contra el estrés oxidativo, el romero puede mejorar la circulación sanguínea y, por lo tanto, promover un mejor flujo de oxígeno y nutrientes al cerebro.

Té de salvia: los compuestos activos en la salvia, como los flavonoides y los ácidos fenólicos, pueden influir positivamente en la memoria y la función cerebral. Estudios preliminares sugieren que la salvia puede ayudar a prevenir la degradación de la acetilcolina, un neurotransmisor crucial para el aprendizaje y la memoria.

Té de romero puede mejorar la circulación sanguínea y, por lo tanto, promover un mejor flujo de oxígeno y nutrientes al cerebro. | Foto: Getty Images

Té de albahaca: esta hierba puede ayudar a equilibrar los niveles de cortisol, la hormona del estrés, lo que a su vez puede mejorar la claridad mental.

Ginkgo biloba: por sus beneficios para la circulación y el flujo sanguíneo al cerebro, esta hierba se ha relacionado con la mejora de la memoria y la concentración, lo que la convierte en una opción valiosa para aquellos que buscan fortalecer su memoria.

Hierba de San Juan: como remedio herbal para la depresión leve, la hierba de San Juan también puede tener beneficios para la concentración. Algunos estudios sugieren que puede influir en la serotonina y otros neurotransmisores que desempeñan un papel en la claridad mental.

Ginseng: con el objetivo de mejorar la resistencia al estrés y aumentar la energía, el ginseng puede ayudar a mejorar la concentración al reducir la fatiga y mejorar la función cognitiva.

Los beneficios que tiene tomar la infusión de tomillo y limón para la concentración. | Foto: Getty Images

¿Por qué se da la desconcentración?

Las distracciones externas son uno de los principales culpables de la desconcentración. Las notificaciones de dispositivos móviles, conversaciones cercanas, ruido ambiental y otros estímulos visuales o auditivos pueden interrumpir constantemente nuestro flujo de trabajo.

Además, a esto se suma que el cansancio mental es una causa común de desconcentración. Cuando se está agotado por una larga jornada de trabajo, falta de sueño o exceso de tareas cognitivas, es más difícil mantener la atención.

Es importante señalar que en la desconcentración es común que el estrés crónico puede tener un impacto significativo, ya que la preocupación constante y la activación excesiva del sistema de respuesta al estrés pueden dificultar la atención plena en una tarea.

El estrés puede ser un gran obstáculo para la concentración. | Foto: Getty Images

¿Cómo maximizar la concentración?

Expertos recomiendan practicar la concentración en actividades simples, como centrarse en la respiración durante unos minutos al día. Esto puede mejorar la capacidad de mantener el enfoque en otras tareas.

Además, dividir las tareas en objetivos más pequeños y alcanzables puede hacer que sean menos abrumadoras y más fáciles de abordar, lo que puede ayudar a mantener la concentración.