Las enfermedades cardiovasculares siguen siendo una de las principales causas de mortalidad en el mundo, a pesar de que muchas de las muertes se podrían evitar si se llegara a un diagnóstico temprano. Precisamente, cuando suceden a tempranas edades es crucial detectar estas patologías para no dejarlas desarrollar de manera crónica.
De esta manera, según un nuevo estudio publicado en el Journal of the American Heart Association, si un niño presenta la pérdida del sentido del olfato de manera recurrente, es muy probables que puede tener un accidente cardiovascular en años posteriores.
Según los resultados del estudio ABC de Salud del Instituto Nacional del Envejecimiento de los Estados Unidos, se examinaron datos de 2.500 personas para demostrar que el alrededor del 45% de las personas con pérdida del olfato son conscientes de que la padecen, por lo que e smuy dificil llegar a detectar la anomalía.
De esta manera, el mismo estudio concluyó que las personas con pérdida olfativa tenían un riesgo aproximadamente un 30% mayor de sufrir fallo cardíaco en comparación con las personas que no tenían este síntoma.
Además, los autores del estudio dijeron que no se encontró una correlación entre la pérdida de olfato y enfermedades cardiacas o accidentes cerebrovasculares. El experto aseguró que: “Estamos un poco sorprendidos por el hecho de que solo encontramos esta conexión con la insuficiencia cardiaca, pero no con la enfermedad coronaria o el ictus”.
Recuerde que una de las mejores opciones para evitar accidentes cardiovasculares es hacer actividad física constante, por lo menos 120 minutos a la semana.
Así como implementar una dieta balanceada, alejada de las azúcares simples, las harinas refinadas y alimentos altos en calorías.