Una alimentación sana es fundamental para prevenir la malnutrición y cualquier tipo de enfermedades o trastornos. A medida que pasan los años, las personas empiezan a entender lo importante que es comer bien y mantener una dieta equilibrada.

Que sea variada, equilibrada y sobre todo saludable, es lo que debe primar en el consumo de alimentos diarios.

Podría asegurar que los jóvenes son quienes más deciden cuidarse y tener una dieta perfecta. En su gran mayoría van al gimnasio, hacen deporte y sobre todo tienen una alimentación correcta.

Pero cambiar la mentalidad de las personas para generar un nuevo estilo de vida no es fácil, sobre todo por el aumento de alimentos procesados, por un estilo de vida ajetreado que lleva a que las personas prefieran comer algo rápido y con un elevado contenido en grasas y sal.

Son precisamente esos alimentos hipercalóricos, los que han empeorado la salud de muchas personas, sobre todo al empezar a presentar enfermedades silenciosas.

Los alimentos sanos son determinantes para tener un buen estado de salud. | Foto: Getty Images

Para los mayores de 50 años

Para la Organización Mundial de la Salud, OMS, la alimentación sana que debe seguir un adulto o una persona mayor de 50 años marca algunos hábitos que pueden suponer un gran beneficio para su salud.

La dieta debería incluir un alto contenido en frutas, verduras, legumbres como las lentejas y las alubias, frutos secos y cereales integrales como el maíz, la avena, el trigo o el arroz moreno no procesado.

El sedentarismo debe quedar a un lado. El ejercicio le dará más vitalidad. | Foto: Dean Mitchell

La OMS recomienda al menos 400 gramos, es decir, cinco porciones, de frutas y hortalizas al día, “excepto papas, batatas, mandioca y otros tubérculos feculentos”, mencionó la entidad.

La cual dijo además que se debe cuidar la ingesta de azúcar, asegurando que “menos del 10% de la ingesta calórica total de azúcares libres, que equivale a 50 gramos o a cerca de 12 cucharaditas rasas, en el caso de una persona con un peso corporal saludable que consuma cerca de 2000 calorías al día, lo ideal para obtener beneficios de salud adicionales sería un consumo inferior al 5% de la ingesta calórica total”, explicó la organización.

Para la OMS, los azúcares libres son “todos aquellos que los fabricantes, cocineros o consumidores añaden a los alimentos o las bebidas”-

A lo que se suman también los azúcares naturales que están presentes en la miel, los jarabes, los zumos y los concentrados de frutas.

Cuidado con las grasas

Sobre el consumo de grasas, la OMS dejó en claro que para mantener una alimentación sana, los adultos deben ingerir menos del 30 % de grasa.

La entidad indicó que “las grasas no saturadas, las cuales están presentes en los pescados, aguacates, frutos secos y en los aceites de girasol, soja, canola y oliva, son preferibles a las grasas saturadas que se encuentran en la carne grasa, la mantequilla, el aceite de palma y de coco, la nata, el queso, la mantequilla, la manteca de cerdo y las grasas trans de todos los tipos, que están presentes en pizzas congeladas, tartas, galletas, pasteles, obleas y aceites de cocina.

Por ello se sugiere reducir la ingesta de grasas saturadas a menos del 10% del consumo total de calorías, y la de grasas trans a menos del 1% .

Cabe señalar que las grasas trans producidas industrialmente no forman parte de una dieta saludable y son precisamente las que se deberían evitar.

Sobre la sal, la organización recalcó que solo se debe consumir menos de 5 gramos al día, es decir, una cucharada y nada más. Además, que este producto debería ser yodado. Con estas recomendaciones, las personas podrían evitar contraer cierto tipo de enfermedades, como las cardiovasculares.

Los expertos recomiendan una alimentación sana, eliminar de la dieta los alimentos procesados y evitar tener una vida sedentaria. Foto: Getty images. | Foto: Getty images