El aguacate es considerado un superalimento ideal para bajar los niveles de colesterol. Además de su atractivo sabor y textura, el aguacate es conocido por su abundante contenido de grasas saludables, fibra y una variedad de nutrientes esenciales, y también tiene un impacto significativo en la salud cardiovascular, ayudando a reducir el colesterol y los niveles de triglicéridos en la sangre.
Según estudios, el aguacate ayuda a reducir los niveles de LDL en la sangre, disminuyendo el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Su bajo aporte de grasas saturadas (15%) hace que sea un producto cuyo consumo diario está recomendado para disminuir el colesterol malo.
De acuerdo con el portal de salud, Adelgazar en Casa, ocho estudios en personas han examinado los efectos del aguacate en algunos de estos factores de riesgo, como que reduce significativamente los niveles de colesterol total, reduce los triglicéridos en la sangre hasta en un 20%. Además, reduce el colesterol LDL hasta en un 22% y aumenta el colesterol HDL (el “bueno”) hasta en un 11%.
Así mismo, el aguacate es una fuente de grasas saludables, principalmente ácidos grasos monoinsaturados, los cuales se han relacionado con la disminución del colesterol LDL (colesterol “malo”) en la sangre. Esto es crucial, ya que altos niveles de LDL están asociados con un mayor riesgo de enfermedades cardíacas.
Por otro lado, y como se ha mencionado anteriormente, el aguacate tiene un efecto de reducción de los triglicéridos. Estos son un tipo de grasa que se encuentra en la sangre y niveles elevados de triglicéridos también están asociados con un mayor riesgo cardiovascular. Los ácidos grasos monoinsaturados del aguacate han demostrado reducir los niveles de triglicéridos en varios estudios.
Por otro lado, aunque el aguacate es relativamente calórico debido a su contenido de grasas saludables, puede ser un aliado en el control de peso. La fibra y las grasas saludables en el aguacate pueden ayudarte a sentirte más lleno y satisfecho, reduciendo así la ingesta calórica total.
Y es que el aguacate es una excelente fuente de nutrientes esenciales como potasio, vitamina K, vitamina E y ácido fólico. Estos nutrientes son beneficiosos para la salud cardiovascular y general.
Cómo el aguacate reduce el colesterol
El aguacate ejerce su impacto positivo en el perfil lipídico de varias maneras:
- Grasas saludables: Los ácidos grasos monoinsaturados, especialmente el ácido oleico, son los principales componentes grasos del aguacate. Estas grasas ayudan a reducir el colesterol LDL sin afectar negativamente al colesterol HDL.
- Fibra soluble: El aguacate es una buena fuente de fibra soluble, que se disuelve en agua y forma un gel en el intestino. Esta fibra se une al colesterol en el tracto digestivo y lo elimina del cuerpo antes de que pueda ser absorbido.
- Antioxidantes y fitoquímicos: El aguacate contiene antioxidantes y fitoquímicos que pueden ayudar a reducir la inflamación y proteger las células de los daños oxidativos. Esto puede contribuir a la salud vascular y a la reducción del riesgo cardiovascular.
Cómo incorporar el aguacate en la dieta
Añadir más aguacate a la dieta es sencillo y delicioso. En ensaladas se puede añadir, cortando trozos de aguacate y agregándolos en las ensaladas para darles un toque cremoso y nutritivo.
Por otro lado, se puede añadir en batidos, agregando medio aguacate a los batidos para darles una textura más suave y un impulso nutricional adicional.
También se puede consumir como guarnición, utilizando el aguacate en rodajas como guarnición para platos de carne o pescado a la parrilla. Además, de preparar salsas y aderezos a base de aguacate, como guacamole, para acompañar las comidas.