Las semillas de calabaza tienen diferentes aportes benéficos para la salud, además de ayudar a mejorar el funcionamiento tanto del cerebro como del corazón, también favorece a la salud intestinal y disminuye la inflamación en el organismo ocasionada por diversas enfermedades.

Los beneficios que aportan son consecuencias de la riqueza de grasas buenas (monoinsaturadas y poliinsaturadas), fibras, antioxidantes, vitaminas como la E, A y C y minerales como el hierro y el magnesio que contienen estas semillas.

Las semillas de calabaza pueden ser consumidas enteras o trituradas, incluso se podrían ser incorporadas en las ensaladas o en la preparación de algunas comidas. Este alimento también se puede encontrar en algunas tiendas de productos naturales y por medio de internet el aceite de semilla de calabaza, que aporta varios beneficios para la salud.

Para aquellas personas que van al gimnasio y buscan aumentar su masa muscular, las semillas de calabaza son recomendadas debido a su excelente proporción de proteínas. | Foto: &#169 Lew Robertson

Propiedades de las semillas de calabaza

Las semillas de calabaza contienen diversas propiedades que incluyen: antioxidantes, antiinflamatorias, hipoglucémicas, analgésicas, digestivas, anticancerígenas, antimicrobianas, antiobesidad, estimulantes y cardioprotectoras.

Todas estas propiedades se deben a que aportan compuestos fenólicos, fibras, fitosteroles, tocoferoles, ácidos grasos poliinsaturados, ácidos grasos monoinsaturados, proteínas y vitaminas E, C, A y del complejo B, así como minerales como el selenio, magnesio y hierro.

Los beneficios de las semillas de calabaza

Son más de diez los beneficios que genera el consumo de semillas de calabaza para la salud, entre ellos están:

1. Favorecer el relajamiento e incrementar el bienestar: Al poseer un buen aporte de magnesio y triptófano, las cuales son sustancias que actúan a nivel cerebral, ayudando a combatir el exceso de estrés, el cansancio y a estimular la memoria

2. Pérdida de peso: Como las semillas de calabaza son ricas en fibra, al consumirlas dejan una mayor sensación de saciedad, lo cual produce que las personas disminuyan las porciones de comida, ingiriendo menos calorías y favoreciendo de esta forma a la pérdida de peso.

De igual forma, la fibra ayuda a controlar la absorción del azúcar a nivel intestinal, provocando que se mantenga más estable en la sangre, disminuyendo la ansiedad. Por tal motivo, es buena idea incluirlas en la dieta diaria, en conjunto con la realización de actividad física.

3. Aumento de masa muscular: Para aquellas personas que van al gimnasio y buscan aumentar su masa muscular, las semillas de calabaza son recomendadas debido a su excelente proporción de proteínas, por lo que, dichas personas podrían agregarlas en las ensaladas, en los batidos, en lo yogures, cereales o inclusive en las meriendas.

4. Protege las células del organismo: Gracias al aporte de compuestos con propiedades antioxidantes, como carotenoides y vitamina E, las semillas de calabaza colaboran con la protección de las células del organismo del efecto de los radicales libres, disminuyendo la inflamación en el organismo y el estrés oxidativo, así como la reducción del riesgo de sufrir algún tipo de cáncer, por ejemplo, el de próstata, mama, estómago y colon.

Las semillas de calabaza contienen diversas propiedades que incluyen: antioxidantes, antiinflamatorias, hipoglucémicas, analgésicas, digestivas, anticancerígenas, entre otras. | Foto: Getty Images

5. Disminuir la inflamación: Las semillas de calabaza cuenta con una excelente fuente de ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, incluido el omega-3, elementos que cumplen una función antiinflamatoria ante los procesos de estrés o de enfermedades que puedan estar inflamando el organismo.

6. Mejora la próstata y la tiroides: Estas semillas son ricas en zinc, un mineral que es importante a la hora de fortalecer el sistema inmune y además ayuda a regular el funcionamiento de la tiroides. También, algunos estudios demuestran que el consumo diario de las semillas de calabaza ayudan a disminuir los síntomas de la hiperplasia benigna de la próstata y mejorar la calidad de vida.

8 Combate la anemia: Al contar con una buena fuente vegetal de hierro, las semillas de calabaza ayudan a combatir la anemia, pudiendo también ser consumidas por personas veganas o vegetarianas para aumentar el aporte de hierro en el cuerpo.

Es importante mencionar que en conjunto con las semillas se ingiera alguna fuente que aporte vitamina C, con el objetivo de favorecer su absorción a nivel intestinal.

9. Combate el dolor de vientre: Combatir el dolor de vientre y los cólicos que se generan durante el síndrome premenstrual, es otro de los beneficios de las semillas de calabaza, pues contiene magnesio, que es un mineral que funciona disminuyendo la contracción muscular y el funcionamiento de los nervios.

10. Cuida la salud del corazón: Como aportan diversos componentes como los fitosteroles, magnesio, zinc y ácidos grasos poliinsaturados y monoinsaturados, estas semillas ayudan a regular la presión arterial, disminuir los niveles de colesterol total y LDL “malo” y a controlar los niveles de azúcar en la sangre, generando un efecto cardioprotector y previniendo el surgimiento de enfermedades cardíacas, como un ACV o un infarto, por ejemplo.

11. Regula el azúcar en la sangre: Al contener fibra y magnesio, las semillas de calabaza ayudan a regular el azúcar en la sangre, siendo una excelente opción para aquellas personas que padecen de pre diabetes y diabetes.

Posee una acción antiparasitaria y antihelmíntica que se usa como remedio para niños y adultos. | Foto: Getty Images

¿Cómo prepararlas?

Para poder consumir estas semillas primero debe extraerse de la calabaza, lavarlas y colocarlas en plato para luego exponerlas al sol, es de suma importancia que cubrir el plato con una malla fina para evitar que las moscas se paren sobre ellas. Una vez secas se podrán consumirse.

Otra manera de prepararlas, es colocándolas en una bandeja con papel vegetal al horno a un máximo de 75° C hasta que queden doradas, por lo general se demora cerca de 30 minutos. Es importante moverlas para evitar que se quemen.