El horno microondas se ha convertido en un electrodoméstico básico en la cocina moderna. Su conveniencia y rapidez hacen que sea una herramienta invaluable para calentar y cocinar alimentos de manera eficiente. Sin embargo, es importante tener en cuenta que hay ciertos alimentos que nunca deberían ser introducidos en un horno microondas.
Al hacerlo, se corre el riesgo de dañar el aparato, crear riesgos para la salud o arruinar la calidad de los alimentos. A continuación, le contamos acerca de los alimentos que deben evitarse en el horno microondas y por qué es mejor utilizar métodos de cocción alternativos para ellos.
Huevos con cáscara:
Los huevos con cáscara nunca deben ser calentados en el horno microondas. A medida que se calientan, el agua dentro del huevo se convierte en vapor y crea presión. Esto puede hacer que el huevo explote dentro del microondas, causando un desorden desagradable y, en casos extremos, incluso provocar lesiones debido al estallido repentino.
Para calentar huevos, es mejor utilizar métodos de cocción tradicionales, como hervir o cocinar a fuego lento.
Carnes procesadas
Estos alimentos contienen químicos y conservantes que aumentan su durabilidad. Investigaciones del Journal of Agricultural and Food Chemistry , aseguran que “cuando se consumen estos alimentos calentados en microondas, podríamos estar expuestos a cambios químicos como el colesterol oxidado”, una alteración que puede dejar serias consecuencias en el organismo.
Pollo
Cuando el pollo queda mal cocido o es recalentado, las personas pueden exponerse a una intoxicación alimentaria por bacterias como la salmonella. Esto hace que se rompa el mito de que “el calor del horno” mata todas las bacterias. Ojo: no hay problema si ya se ha empleado otra técnica de cocción y se recalienta ya preparado, la clave es no recurrir a este proceso si está crudo.
Frutas cítricas enteras:
Las frutas cítricas enteras, como naranjas o limones, no deben ser introducidas en el horno microondas. Estas frutas contienen una alta cantidad de agua y jugo en su interior. Cuando se calienten en el microondas, pueden acumular vapor y presión dentro de la piel, lo que puede resultar en explosiones y un desorden significativo.
Además, el sabor y la textura de las frutas cítricas pueden alterarse drásticamente cuando se calientan en el microondas. Es preferible disfrutarlas frescas o utilizarlas en recetas que requieran cocción en otros métodos.
Alimentos con envoltorios de metal:
Los alimentos envueltos en papel de aluminio o contenedores metálicos no deben ser introducidos en el horno microondas. El metal refleja las microondas y puede provocar chispas, incendios o daños en el horno.
Además, los recipientes metálicos pueden generar corrientes eléctricas que pueden ser peligrosas. Si desea calentar alimentos que se encuentran en envoltorios de metal, es mejor transferirlos a recipientes de vidrio o cerámica aptos para microondas.
Recipientes y bolsas de plástico no aptos para microondas:
No todos los plásticos son seguros para su uso en el horno microondas. Algunos plásticos pueden liberar sustancias químicas dañinas cuando se calientan, lo que puede contaminar los alimentos y representar un riesgo para la salud.
Siempre verifique que los recipientes y bolsas de plástico utilizados sean aptos para microondas. Busque el símbolo de “microondas seguro” en el envase o utilice recipientes de vidrio o cerámica si no está seguro sobre la seguridad del plástico.
Es importante recordar que cada horno microondas es diferente y puede tener características y capacidades específicas. Algunos modelos pueden tener funciones de cocción especiales o estar equipados con tecnología de detección de alimentos para evitar daños o riesgos. Sin embargo, es esencial seguir las recomendaciones generales y evitar introducir alimentos que presenten riesgos conocidos en el horno microondas.
Por lo tanto, hay ciertos alimentos que deben evitarse en el horno microondas para evitar daños en el electrodoméstico y garantizar la seguridad alimentaria. Siempre es mejor utilizar métodos de cocción alternativos, como cocción en el horno convencional, hervir o cocinar a fuego lento, para garantizar resultados seguros y deliciosos.