Uno de los factores más importantes para mantener la salud cognitiva y evitar enfermedades degenerativas como la demencia senil o el Alzheimer, es la actividad física y la alimentación.
En la primera opción, los expertos recomiendan ejercitarse cardiovascularmente, al menos 120 minutos a la semana. Esto quiere decir trotar, correr, o caminata extendida.
Precisamente, existe un tubérculo que tiene grandes benéficos y ayuda a la memoria de manera extraordinaria. Se trata del ñame.
Es importante tener en cuenta que el ñame es un tubérculo que se da regiones tropicales y subtropicales de África, América, Asia y Oceanía, y en menor medida, en Europa.
En apariencia, el bulbo del ñame es similar a la yuca, aunque su forma es más redondeada. El tubérculo, generalmente alargado, entre circular y ovalado, está cubierto por una cáscara rugosa y áspera, un poco más delgada que la de la yuca.
Su interior es rígido, pero fácil de cortar y puede ser blanco, amarillo o moteado de rojo o violeta, según las diferentes variedades que existen.
De esta manera, un estudio publicado por el Instituto Nacional de la Salud (NIH) de Estados Unidos indica que la diosgenina presente en el ñame fomenta la actividad neuronal y mejora la función cognitiva, lo que es indicativo de que fortalece la memoria.
Asimismo, contiene metionina, triptófano y histidina que ayuda a la agilidad mental, este tubérculo también contiene aminoácidos esenciales como valina, arginina, leucina e isoleucina. Es un alimento rico en fibra y bajo en grasa que estimula el apetito y permite mantener la sensación de saciedad por más tiempo.
Recuerde que antes de comer cualquier alimento o de incluirlo a su dieta, debe consultárselo a su médico de confianza para que le dé su consejo profesional.