Las opciones de tratamiento para enfermedades avanzadas dependen del tipo de enfermedad, su origen y su extensión en el cuerpo. Por lo general, el tratamiento médico para enfermedades avanzadas se administra de manera sistémica, como la quimioterapia, terapia dirigida, inmunoterapia y terapia hormonal. Estos tratamientos se pueden tomar en forma de pastillas o mediante infusiones intravenosas.

En ocasiones, se pueden utilizar tratamientos localizados, como cirugía o radioterapia, para prevenir o aliviar síntomas específicos. Además, se busca aliviar síntomas como el dolor, el estreñimiento, las molestias estomacales y los vómitos para mejorar su calidad de vida. Siempre hay algo que se puede hacer para mantener o mejorar su bienestar.

El objetivo principal de la atención médica en casos de enfermedad avanzada es proporcionar la mejor calidad de vida posible. Es importante que se sienta lo mejor que pueda y durante el mayor tiempo posible. Comparta con su equipo médico cuáles son las cosas que le importan y que le gustaría seguir haciendo. Usted tiene derecho a participar en las decisiones sobre su plan de tratamiento.

Tratamiento de cáncer. (imagen de referencia) | Foto: Getty

Algunas personas pueden decidir continuar con los tratamientos contra la enfermedad mientras haya alguna posibilidad de beneficio. Otras pueden considerar los efectos secundarios, el costo o la dificultad de los viajes como factores que influyen en su decisión de aceptar o rechazar ciertos tratamientos.

Cada persona tiene derecho a tomar decisiones sobre su propio cuidado. Puede resultar útil involucrar a sus seres queridos en estas decisiones difíciles. Sea cual sea su elección, el objetivo es que tome decisiones que sean adecuadas para usted.

El tratamiento de los síntomas del cáncer avanzado

Aunque es verdad que algunos casos de cáncer avanzado no son curables, existen medidas que se pueden tomar para mejorar su bienestar durante el mayor tiempo posible. El enfoque en aliviar el sufrimiento y mejorar la calidad de vida se conoce como atención de apoyo.

La atención de apoyo se centra en el paciente y su familia, no solo en la enfermedad. Este tipo de tratamiento está diseñado para abordar los síntomas causados por el cáncer y su tratamiento. Algunos profesionales también lo llaman cuidado paliativo.

Los síntomas pueden variar dependiendo de la ubicación del cáncer en el cuerpo. No todas las personas experimentan todos los síntomas mencionados. En muchos casos, los síntomas no son directamente causados por el cáncer y pueden tener múltiples causas. Su médico puede brindarle más información sobre la ubicación específica del cáncer y los síntomas que puede ocasionar.

Existen varios síntomas que puede sufrir una persona con cáncer avanzado. | Foto: Thomas Tolstrup

Algunos de los síntomas comunes que pueden ser controlados o aliviados con atención de apoyo incluyen:

  • Dolor
  • Depresión y ansiedad
  • Fatiga y debilidad
  • Pérdida de apetito
  • Cambios de peso
  • Náuseas y vómitos
  • Estreñimiento
  • Inflamación abdominal

Es posible que cuando el cáncer se propague a otras partes del cuerpo, como el cerebro, los huesos, el hígado o los pulmones, se presenten otros síntomas. Puede obtener más información sobre la propagación del cáncer (metástasis) en las secciones correspondientes de las páginas a las que se puede acceder a través de los siguientes enlaces:

Es importante destacar que el objetivo de la atención de apoyo es prevenir y aliviar el malestar y el sufrimiento causados por los síntomas, brindando apoyo para lograr la mejor calidad de vida posible tanto para los pacientes como para sus familiares, sin importar la etapa de la enfermedad.

Dificultad para respirar: Experimentar dificultad para respirar puede ser extremadamente problemático, ya que limita la capacidad para realizar muchas actividades y puede aumentar la ansiedad y la depresión. No todas las personas con cáncer avanzado enfrentarán problemas respiratorios, pero es importante conocer qué síntomas podrían surgir y cuándo buscar atención médica para abordar estos problemas.

Bloqueo intestinal: El cáncer en el área abdominal (vientre) puede provocar obstrucción en los intestinos, lo cual impide el paso adecuado de alimentos y desechos. Esto puede causar fuertes calambres, dolor abdominal y vómitos. Si no se trata la obstrucción intestinal mediante la creación de una abertura para aliviarla, la acumulación de presión puede resultar en una perforación que permita que los contenidos intestinales se filtren hacia la cavidad abdominal. Esto puede llevar a infecciones graves debido a la exposición bacteriana, empeorando el dolor abdominal, las náuseas y los vómitos. Una obstrucción intestinal es una situación grave que requiere atención médica de inmediato.

Los dolores abdominales son muy comunes en pacientes con cáncer, especialmente en una etapa avanzada.

Bloqueo renal: El cáncer en el abdomen también puede bloquear los uréteres, los tubos delgados que llevan la orina desde los riñones hasta la vejiga. Cuando esto ocurre, el flujo de orina puede obstruirse, lo que hace que la orina regrese a los riñones y provoque un mal funcionamiento. Esto eventualmente causa una sensación de cansancio extremo y malestar estomacal en el paciente.