Cada vez más personas se enfrentan a problemas para conciliar el sueño o tener un descanso de calidad. En la actualidad, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce 88 tipos diferentes de trastornos del sueño, siendo el insomnio es el más habitual, que afectan a un 40 % de la población occidental.
Solamente aquellas personas que descansan lo suficiente se mantienen física y psicológicamente sanas, ya que en este periodo el organismo recupera y procesa información valiosa que posiblemente relegó durante la vigilia.
Sobre las horas de sueño, hay muchos debates, sin embargo, se recomienda que no sea menos de seis ni más de nueve.
Tener problemas para conciliar el sueño ocurre incluso cuando se tiene el tiempo y el entorno correcto para dormir bien, ya que puede ser a causa de estrés, molestias de salud, cambios hormonales o exceso de tecnología.
Hay otros factores que pueden afectar como falta de rutina, trabajar por turnos o en horario nocturno, ruidos o luz durante la noche o temperaturas incómodamente altas o bajas.
1. Infusión de manzanilla:
Esta planta con su flor es un potencial relajante, que gracias a que eleva los niveles de serotonina y melatonina ayuda a reducir la ansiedad y estrés, factores que pueden causar dificultad para dormir.
También se ha utilizado a lo largo del tiempo para combatir el insomnio por su contenido de apigenina, un antioxidante que se necesita para promover la somnolencia al calmar al sistema nervioso.
De acuerdo con un estudio de 2017, el consumir extracto de manzanilla mejoró la calidad del sueño en los adultos mayores que se sometieron al análisis.
La manzanilla es usada también para aliviar trastornos digestivos y otras afecciones cotidianas.
2. Infusión de toronjil
También conocida como Melisa u hoja de limón, es una hierba a la que se le da un uso principalmente medicinal. Principalmente en la medicina tradicional o medicina naturista es apreciada por tener efecto directo en el sistema nervioso del cuerpo, que logran relajar los estados de alteración o agitación causados por la ansiedad o incluso la depresión.
La infusión debe beberse por lo menos 30 minutos antes de ir a la cama, y prepararse al momento para aprovechar sus efectos al máximo. Su puede tomar entre 3 y 4 tazas de infusión de toronjil al día, aunque no se recomienda para las mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
3. Infusión de lavanda
Esta bella flor es conocida por su color y sus usos en la cosmética y aromaterapia y también es una gran aliada a la hora de dormir. Se trata de una planta con efectos sedantes, y su ingesta también es recomendada para disminuir padecimientos como la ansiedad y para reducir los niveles altos de estrés.
Dentro de sus propiedades se encuentra la capacidad de inducir un sueño más profundo, así como a conciliarlo de manera más sencilla. Al reducir la agitación, el cuerpo entra en un estado de calma que permite que la somnolencia se manifieste.
Para preparar la infusión solo basta con añadir las flores de lavanda en una taza con agua caliente. Dejar reposar por cinco minutos, colar y bebe sin endulzar. Se recomienda no endulzar, pues los carbohidratos pueden contrarrestar su efecto relajante.
Consejos para dormir bien
- Mantener un horario de sueño organizado, regularizar la hora de acostarse y levantarse.
- Evitar dormir por el día, si acaso una siesta de media hora. Si duerme, hágalo a la misma hora todos los días.
- Dormir lo necesario para sentirse saludable, no pasar un tiempo excesivo en la cama.
- Ambiente tranquilo y confortable.
- La cena debe ser ligera, pero evitar acostarse con hambre.
- Mantenga un horario regular para comer, tomar medicamentos, aficiones y otras actividades. Todas ellas mantienen ajustado a la hora, nuestro reloj biológico interno.
- Leer u otro ritual inductor del sueño que no esté relacionado con pantallas como la del celular, televisor o computador.
- Evitar estimulantes, alcohol y tabaco.
- Realizar ejercicio regular diario, no previo a acostarse.
- Establecer algún ritual previo al sueño. Por ejemplo, darse un baño caliente, ingerir una comida liviana o 10 minutos de lectura.