Las hojas del árbol de olivo tienen propiedades que ayudan al organismo a mejorar la digestión, además es rico en antioxidantes, manitol, colesterina, cicloartenol, esterina, aracluína, oleína, ácido benzoico y ácido palmítico.
De acuerdo con el portal especializado en salud Oliaesa, “las propiedades de la hoja del olivo resultan beneficiosas para determinadas enfermedades y patologías. Deben ser hojas que no hayan sido fumigadas con anterioridad para poder beneficiar a quienes la consumen de todas sus propiedades”, explica.
También ayuda a regular los niveles de glucosa en la sangre, por lo que es aconsejable que personas que padezcan de diabetes la consuman. Sin embargo, es importante aclarar que no sustituye ningún tratamiento indica se debe hacer siempre y cuando un especialista lo avale.
“Investigaciones y estudios científicos recientes están comprobando la relación de la oleuropeína y su compatibilidad con tratamientos médicos para la diabetes mellitus tipo II”, precisa.
El sitio web también indica que para poder aprovechar todos sus beneficios se debe realizar de forma adecuada, en este caso, sería en infusión. “Su elaboración resulta bastante sencilla, ya que solo se necesita hervir agua y añadir unas cuantas hojas de olivo para tener hecha la preparación”.
Los expertos también afirman que es importante acompañar este remedio casero con una dieta balanceada basada en frutas y verduras, ejercicio diario (al menos 15 minutos al día por tres días a la semana).
Oliaesa también explica que una de las propiedades más conocidas de la oleuropeína que es un componente de las hojas de olivo es su función antiinflamatoria.
“Las hojas de olivo ayudan a prevenir y aliviar los dolores de la artritis reumatoide, la artrosis e incluso la gota. Gracias a esos efectos antiinflamatorios, la oleuropeína es capaz de bloquear una enzima que favorece la acumulación de ácido úrico (típico de la gota)”, añade.
Las hojas de olivo también pueden tratarse como complemento en tratamientos de enfermedades originadas por virus, bacterias u hongos. “Aumentan la función inmunológica del organismo, alejando parásitos y previniendo resfriados y virus. Esto no quiere decir que las hojas de olivo reemplacen tratamiento médico, simplemente que pueden resultar complementarias”, indican expertos en salud.
Como se mencionó anteriormente, las hojas del árbol de olivo contienen tirosol que protege contra alteraciones relacionadas con el aumento de azúcar.
“La oleuropeína es un polifenol, siendo un potente antioxidante natural. Así, una de las grandes propiedades de las hojas del olivo es su acción antioxidante. Los polifenoles de las hojas de olivo luchan contra los radicales libres externos favoreciendo la salud de la piel”, sostiene.
Expertos también precisan que este glucósido tiene capacidad antioxidante, lo que ayuda a la protección de las células, dando buenos resultados en el aspecto de la piel, mejorando su elasticidad e hidratación. También es capaz de actuar contra los radicales libres provocados por la contaminación ambiental y los rayos ultravioleta, dejando atrás el envejecimiento prematuro.
El olivo puede ser usado también en diferentes afecciones de la piel, como forúnculos, eccemas, herpes simple, sequedad de la piel, uñas quebradizas, mordeduras y picaduras de insectos y quemaduras. Asimismo, un té elaborado con las hojas de olivo se puede utilizar como antiséptico bucal, en el sangrado e infección de las encías, en gargarismo y en el dolor de garganta.
Sumado a los anteriores beneficios se añade que calma desórdenes digestivos e inflamatorios, gastritis, colitis y hasta la úlcera péptica. Igualmente, puede una alternativa para lavado gástrico “en casos de envenenamiento por agentes corrosivos, para suavizar la mucosa irritada y acelerar la eliminación.
El portal especializado Tua Saúde también precisa que el té de hojas de olivo estimula el flujo de la bilis, y se puede usar para curar problemas de vesícula biliar y hepáticos.
Los beneficios no solo son digestivos, sino que también ayudan a calmar la tos seca, la laringitis, bajar la fiebre, y mejorar en sí, las condiciones de salud de las personas cuando están pasado por una afección de gripa o resfriado. Para ello, se debe tomar una infusión caliente de hojas de oliva.
Finalmente, es importante destacar que tiene propiedades similares al iburofeno, por lo que ayuda a aliviar síntomas de inflación.