La cúrcuma, una planta con flores de la familia del jengibre, se ha hecho reconocida por sus propiedades medicinales. Lo anterior debido a que contiene curcumina, un pigmento. Se trata de un polifenol, una sustancia que se encuentra en muchas plantas y le da su color a algunas flores, frutas y vegetales, con el que no solo se obtiene esos beneficios, sino que contribuye a aumentar la cantidad de antioxidantes que produce el organismo.

Ayuda a aliviar el dolor de las articulaciones: la Arthritis Foundation menciona varios estudios en los que la cúrcuma ha demostrado su acción antiinflamatoria, lo que podría reducir los síntomas que padecen las personas con artritis en sus articulaciones.

Algunos investigadores médicos mencionan que esta especia tiene la capacidad de aliviar el dolor e incluso puede funciona de la misma manera que los hace un ibuprofeno. Sin embargo, aún no hay estudios que reafirmen esto. Un estudio publicado en el Journal of Alternative and Complementary Medicine mencionó que la cúrcuma podría reducir el dolor de rodillas en pacientes con artritis; sin efectos secundarios.

La cúrcuma tiene muchos beneficios. | Foto: Pixabay

Mejora la salud de la piel: la cúrcuma también es usada a nivel cosmético, debido a sus propiedades antifúngicas y antibacterianas elimina las impurezas, por lo que es usada de manera frecuenta en la piel del rostro para eliminar la grasa y el acné; además, ayuda a reafirmar la piel y a exfoliarla. También aclara manchas causadas por la edad.

Mejora la función hepática: gracias a sus efectos antioxidantes la cúrcuma puede evitar que las toxinas dañen el hígado.

Alivia el dolor de garganta: la curcumina, demetoxicurcumina y bis-demetoxicurcumina, que en conjunto se llaman curcuminoides, actúan para brindar alivio al ardor, dolor e hinchazón de la garganta.

cúrcuma y jengibre | Foto: Getty Images

Trae beneficios para la salud del corazón: gracias al potencial de la cúrcuma esta puede ayudar a mejorar la circulación, por ende protege a este órgano de ciertos padecimientos.

Protege la salud del cerebro: la turmerona fue descubierta por científicos del Instituto de Neurociencia y Medicina en Jülich, Alemania. Este compuesto tiene como función multiplicar las células madre en el cerebro; gracias a esta acción se podría avanzar en el desarrollo de medicamentos para tratar trastornos neurológicos, accidentes cerebrales e incluso para enfermedades neurodegenerativas.