En la tarde del viernes 15 de diciembre se reveló la causa exacta de la muerte del actor de ‘Friends’, Matthew Perry, quien fue encontrado sin vida el pasado sábado 28 de octubre.
De acuerdo con el departamento médico forense del condado de Los Ángeles, el actor de ‘Friends’, Matthew Perry, falleció debido a “efectos agudos de ketamina”. El interprete había sido encontrado sin vida en su residencia y murió de forma “accidental”, concluyeron las autoridades, en su momento.
La ketamina, que tiene uso recreativo, también es una droga utilizada en algunos casos para tratar la depresión. Según la autopsia, por “los altos niveles” de la droga encontrados en su sangre “los principales efectos letales serían sobreestimulación cardiovascular y depresión respiratoria”.
En el pasado, Perry habría recibido infusiones de ketamina para controlar la depresión y la ansiedad, informó el departamento forense. Asimismo, de acuerdo con la investigación sobre su caso, “su último tratamiento había sido una semana y media antes de su muerte, y la ketamina en su sistema al fallecer no podría ser de esa infusión, debido a que la ketamina permanece de 3 a 4 horas”.
¿Quién era Matthew Perry?
El actor, cuyo personaje sarcástico y tierno hizo reír a millones, había luchado con varias adicciones y graves problemas de salud durante años. Pero su sorpresiva muerte causó conmoción. De acuerdo con los testimonios recogidos por los investigadores, Perry había permanecido sobrio durante los últimos 19 meses, y había dejado de fumar dos semanas antes de fallecer. Además, no fueron encontradas drogas ilícitas o alcohol en la residencia.
“No se reportaron rastros de alcohol, metanfetamina, cocaína, heroína, PCP ni fentanilo”, reporta el dictamen de Medicina Legal.
¿Qué es la ketamina?
La ketamina es una droga disociativa con potencial alucinógeno, derivada de la fenciclidina, utilizada original y actualmente en medicina por sus propiedades sedantes, analgésicas y sobre todo, anestésicas.
La ketamina fue sintetizada en 1962 por Calvin Stevens y usada por primera vez en la práctica clínica en 1965 por Corsen y Domino. El efecto clínico de la ketamina se define como “bloqueo sensorial somestésico con amnesia y analgesia”.
Esta droga se vende en forma de polvo o líquido. En su forma en polvo puede ser inhalado por la nariz, inyectado o consumido por vía oral. El humo tiene un sabor amargo característico, pero los efectos son mucho más precoces en comparación con los otros métodos de consumo, sin embargo los efectos se disipan rápidamente.
La ketamina normalmente se inyecta en la pierna. La aparición de los efectos al administrarlo mediante inyección intramuscular es de aproximadamente un minuto. Los usuarios más avanzados usan la vía intravenosa como método primario de consumo debido a que de esta forma, se salta el paso hepático, incrementando la eficacia de la dosis.
Por vía oral se requieren dosis mucho más altas, a pesar de que el efecto dura más. Sin embargo, cuando la ketamina es administrada de esta forma, el organismo rápidamente la metaboliza a norketamina, la cual posee efectos sedantes. Esta vía de administración no suele provocar el mismo estado disociativo que se produce en las otras vías de administración, a menos que se usen grandes dosis.
Vale la pena contar que en Colombia se han realizado hallazgos de la fabricación de la sustancia de forma clandestina para preparar mezclas de drogas de diferentes compuestos como el ‘tusibi’ que puede ocasionar sobredosis, intoxicaciones e, inclusive, la muerte.
Efectos neurológicos
El primero y más grande estudio longitudinal de usuarios de ketamina encontró que en pacientes que consumían grandes dosis de ketamina tenían deterioro mental, principalmente a nivel de la memoria, afectando la memoria verbal, a corto plazo y memoria visual. Sin embargo, el consumo ocasional (1 a 2 veces por mes) no produjo diferencias notorias.
En abril de 2014 un estudio de unos científicos de la Universidad de Oxford desvela que en dosis bajas puede contrarrestar la depresión severa. En 2019, la FDA estadounidense aprobó un aerosol nasal a base de ketamina para el tratamiento de la depresión. Hay que destacar que, clínicamente, el componente de la droga se usa para hacer perder la sensibilidad y conciencia o inducir sueño a los pacientes que van a cirugía. Según el Instituto Nacional del Cáncer, este medicamento, también conocido como anestésico general ‘Ketalar’, está en estudio para el tratamiento del dolor causado por la quimioterapia.