Los cálculos renales, también conocidos como litiasis renal, son depósitos duros y cristalinos que se forman en los riñones y pueden causar dolor intenso y malestar. De acuerdo con la Asociación Americana de Urología, aproximadamente el 10% de la población sufre de cálculos renales en algún momento de su vida.

Cuando hay cálculos en los riñones, la persona puede sentir un dolor intenso en el costado o en la espalda, que puede irradiarse hacia la ingle o hacia el abdomen. Según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de Estados Unidos, el dolor también puede cambiar de intensidad y moverse a medida que el cálculo se mueve a través del tracto urinario.

Expertos aconsejan llevar una dieta baja en sal y tomar líquidos para prevenir los cálculos renales (Imagen de referencia) | Foto: Getty images.

Además del dolor, se puede experimentar otros síntomas como náuseas, vómitos, sudoración excesiva y necesidad frecuente de orinar. También pueden notar sangre en la orina, que puede ser visible a simple vista o solo detectada por un análisis de orina.

Es importante buscar atención médica inmediata si se experimenta alguno de estos síntomas, ya que los cálculos renales pueden causar complicaciones graves si no se tratan adecuadamente. Según los Institutos Nacionales de Salud de EE. UU., estas complicaciones pueden incluir infecciones urinarias, daño renal y bloqueos del tracto urinario que pueden requerir cirugía.

¿Cómo prevenir los cálculos en los riñones?

Una de las formas más efectivas de prevenir los cálculos renales es mantener una buena hidratación. Beber suficiente agua ayuda a diluir la orina, lo que reduce la concentración de minerales y evita que se formen cálculos. Según el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales de EE. UU., se recomienda beber al menos 8 vasos de agua al día, aunque esta cantidad puede variar según la persona y su nivel de actividad.

Una de las formas más efectivas de prevenir los cálculos renales es mantener una buena hidratación (Imagen de referencia) | Foto: GettyImages

Otra medida de prevención, de acuerdo con el Instituto, es limitar el consumo de alimentos ricos en oxalato, un compuesto que puede contribuir a la formación de cálculos renales. Según la Clínica Mayo, los alimentos ricos en oxalato incluyen espinacas, remolacha, chocolate, té y nueces. Esto no significa que deba eliminarse completamente estos alimentos de la dieta, pero sí es recomendable limitar su consumo.

Además, los expertos recomiendan limitar el consumo de sal y proteína animal, ya que pueden contribuir a la formación de cálculos renales. La Asociación Americana de Urología también aconseja mantener un peso saludable y hacer ejercicio regularmente como medidas de prevención.

Es importante recordar que la prevención de los cálculos renales depende de varios factores, incluyendo la edad, el sexo, la dieta y otros problemas de salud. Por lo tanto, es importante consultar con un médico para determinar las mejores medidas preventivas para cada persona.

Alimentos que ayudan a tener los riñones sanos

Los riñones son órganos importantes para la eliminación de desechos y el mantenimiento del equilibrio químico del cuerpo. Una buena nutrición puede ayudar a mantener los riñones sanos. Según la Asociación Americana de Dietética, los siguientes alimentos pueden ser beneficiosos para la salud renal:

  • Frutas y verduras: Las frutas y verduras son ricas en vitaminas y minerales que pueden ayudar a mantener los riñones sanos. Además, son bajas en sodio, lo que puede ayudar a controlar la presión arterial y reducir el riesgo de enfermedad renal crónica.
  • Grasas saludables: Las grasas saludables, como las que se encuentran en el aceite de oliva, el aguacate y los frutos secos, pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud renal.
  • Pescado: El pescado es una buena fuente de proteína saludable que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedad renal crónica. El salmón, la caballa y el atún son ricos en ácidos grasos omega-3 que pueden ayudar a reducir la inflamación y mejorar la salud renal.
  • Legumbres: Las legumbres, como los frijoles y las lentejas, son ricas en proteínas vegetales y fibra, lo que puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedad renal crónica.
  • Agua: El agua es fundamental para mantener los riñones sanos, ya que ayuda a eliminar los desechos y mantener la función renal adecuada. Es importante beber suficiente agua y evitar la deshidratación.

Es importante recordar que una dieta saludable es solo una parte de un estilo de vida saludable para mantener los riñones sanos. Según la Asociación de Dietética, también es importante limitar el consumo de alcohol y tabaco, hacer ejercicio regularmente y controlar la presión arterial y los niveles de glucosa en sangre.

Es importante consultar con un médico para determinar las mejores medidas preventivas para cada persona o si se experimenta dolor en los riñones (Imagen de referencia) | Foto: riñones