Llevar un estilo de vida saludable implica adoptar hábitos y comportamientos que promuevan el bienestar físico, mental y emocional de cada persona. Es importante tener una alimentación equilibrada, realizar actividad física con regularidad, manejar los niveles de estrés, hidratarse adecuadamente, evitar el consumo excesivo de alcohol y tabaco, entre otros factores.
Uno de los aspectos más importantes de adoptar estos hábitos saludables en la vida diaria es encontrar un equilibrio y un estilo de vida sano que se adapte a las necesidades y preferencias de cada persona.
Una de las alternativas para iniciar una vida sana es aumentar el consumo de semillas, las cuales son pequeñas, pero poderosas fuentes de nutrientes y compuestos beneficiosos para la salud.
Las semillas tienen un alto contenido de nutrientes, contienen un alto grado de grasas saludables, son una fuente de fibra dietética, contiene antioxidantes, controlan el peso, regula los niveles de azúcar en la sangre, aportan beneficios para fortificar los huesos, entre otros.
Beneficios del ajonjolí para la salud
Una de las semillas que contiene más beneficios para la salud es el ajonjolí, también conocido como sésamo, es una semilla pequeña y ovalada que se utiliza ampliamente en la cocina y la medicina tradicional.
El ajonjolí es una excelente fuente de nutrientes, como proteínas, fibra, grasas saludables, calcio, hierro, magnesio, fósforo, zinc y vitamina E. Estos nutrientes son esenciales para el funcionamiento adecuado del cuerpo y para mantener una buena salud en general.
Además, es rico en calcio, un mineral necesario para mantener huesos y dientes fuertes. También, contiene otros minerales como el magnesio y el fósforo, que también son importantes para la salud ósea.
Debido a su alto contenido de antioxidantes, el ajonjolí puede tener efectos beneficiosos para la salud, como la reducción del estrés oxidativo y la prevención de enfermedades crónicas como la diabetes.
Ayuda a controlar la diabetes
El ajonjolí puede ser beneficioso para controlar la diabetes debido a su contenido de fibra, grasas saludables y compuestos antioxidantes.
La fibra ayuda a ralentizar la digestión y la absorción de los carbohidratos, lo que puede ayudar a controlar los niveles de azúcar en la sangre después de las comidas. También puede promover la saciedad y ayudar a controlar el apetito.
El ajonjolí contiene grasas saludables, como los ácidos grasos insaturados, incluidos los ácidos grasos omega-6 y omega-9. Estas grasas pueden ayudar a mejorar la sensibilidad a la insulina y reducir la resistencia a la insulina en el cuerpo, lo que es beneficioso para las personas con diabetes tipo 2.
Además, contiene antioxidantes, como la vitamina E y otros compuestos fenólicos, que pueden ayudar a reducir el estrés oxidativo y la inflamación en el cuerpo. Esto puede ser beneficioso para prevenir complicaciones relacionadas con la diabetes, como enfermedades cardiovasculares y daño a los vasos sanguíneos.
Es importante tener en cuenta que el ajonjolí no es un tratamiento para la diabetes y no debe reemplazar otras medidas de control de la enfermedad, como seguir una dieta equilibrada, hacer ejercicio regularmente y tomar los medicamentos recetados según las indicaciones del médico.
Mantiene los huesos fuertes
El ajonjolí puede ser beneficioso para fortalecer los huesos debido a su contenido de nutrientes esenciales, como el calcio, el magnesio y el fósforo.
Es una buena fuente de calcio, un mineral esencial para la salud ósea. El calcio es necesario para mantener huesos y dientes fuertes, y también desempeña un papel importante en la contracción muscular y la transmisión de señales nerviosas.
Esta semilla es rica en magnesio, otro mineral importante para la salud ósea. El magnesio trabaja en conjunto con el calcio para ayudar a fortalecer los huesos y regular la formación y el mantenimiento del tejido óseo.
Además contiene fósforo, un mineral que también es esencial para la salud ósea. El fósforo ayuda a formar la estructura mineral de los huesos y juega un papel en la producción y el almacenamiento de energía en el cuerpo.
Cabe recordar que el ajonjolí no es la única fuente de estos nutrientes, por lo que es importante mantener una dieta equilibrada y variada que incluya otras fuentes de calcio, magnesio y fósforo, como productos lácteos, vegetales de hoja verde, pescado, nueces y legumbres.