La dependencia emocional se refiere a la situación de una persona que no se permite salir de una zona problemática sin apoyo de otras personas. Esta posición se tiende a desarrollar mucho más frecuente en relaciones de pareja, donde uno de los dos depende del otro para mantener su equilibrio emocional, lo que termina siendo un impedimento de su propia felicidad.
“Supone una dependencia psicológica que se manifiesta a través de una serie de comportamientos adictivos en una relación donde existe una asimetría de roles, de tal manera que se despliegan conductas desproporcionadas e inadecuadas para satisfacer la necesidad de afecto”, explicó el portal especializado Psicólogos Madrid Capital.
Pues bien, los expertos en salud mental han evidenciado algunas estrategias que si se cumplen a cabalidad y responsabilidad, entonces pueden resultar efectivas para romper con la dependencia emocional y los lazos dañinos que se crean a través de las dinámicas de pareja.
Según el portal Porque quiero estar bien, el primer paso para vencer la dependencia emocional es reconocer que se sufre de ella, el darse cuenta de los males a la salud mental que este tipo de situaciones propagan, y que todo radica en la necesidad de ligar la estabilidad emocional con las respuestas de la pareja, entre otros.
- Acepta la incertidumbre y el miedo a estar solo.
- Aprende a decir “no” de forma respetuosa con los demás y consigo mismo.
- Refuerza tu autoestima, ten en cuenta que una relación tóxica solo la afecta más.
- Aprende a estar solo o sola.
- Cuestiona tus creencias acerca del amor, las relaciones de pareja, personales, la soledad y la soltería. Busca la independencia.
- Ábrete a la vida social y disfruta de relaciones más saludables sin la dependencia de una única persona.
- Busca ayuda psicológica, en ocasiones se necesita más de unos cuantos consejos.
Síntomas de la dependencia emocional
Según recalcó el portal Psicólogos Madrid Capital, hay algunos síntomas que se pueden detectar para evidenciar si una persona está sufriendo de dependencia emocional, entre ellos están: “necesidad de aprobación constante; ansiedad ante la idea de perder a la persona; sentir que no se puede vivir sin la otra persona; incapacidad para tomar decisiones sin la opinión de la otra persona; sentirse solo o vacío sin la presencia de la otra persona y una baja autoestima”.
Pues bien, este tipo de situaciones, además de afectar la salud mental de la persona que lo sufre y dañar la relación, también hacen que la persona desarrollo miedos, ansiedades, culpa, sea más vulnerable a conductas adictivas, depresión, pensamientos obsesivos, alteraciones del sueño, abandono de relaciones sociales y de ocio, según el portal citado.
“La persona afectada es capaz de reconocer el maltrato, pero no tiene la capacidad de terminar la relación por estar ‘enganchada’ emocionalmente a su pareja. La dependencia emocional en la pareja puede conducir a una situación extrema de círculo vicioso, es decir, en un momento dado la relación termina rompiéndose; pero al poco tiempo el dependiente intentará a recuperar su expareja incondicionalmente”, explicó el portal Porque quiero estar bien, agregando otras de las consecuencias de mantener lazos dependientes.
Así entonces, la dependencia emocional puede terminar siendo la perpetración de un mal así mismo, por lo que los expertos piden a las personas que logran detectar que sufren de esta situación que se pongan en contacto con un psicólogo de confianza, con el que puedan comenzar a tratar la dependencia y además, tomar acciones para romper con los lazos que no le impiden ganar la independencia necesaria, tomar decisiones por su propia cuenta e incluso, aumentar su propia autoestima.