La llegada de la ola de calor a muchas partes del mundo y los cambios bruscos de temperatura, son un factor determinante a la hora de elegir las prendas de vestir. En estas épocas, es muy común que se dejen atrás los zapatos cerrados y se pase a usar sandalias y todo tipo de calzado que deje los pies más expuestos para evitar el calor.
Sin embargo, hay que ser cuidadosos con los climas cálidos a la hora de vestir, pues se puede estar facilitado la aparición de hongos en los dedos y otras zonas de los pies. Esto puede darse en el momento de usar medias o zapatos con los pies húmedos, además, si el calzado es ajustado y no permite que el pie transpire adecuadamente, esto puede causar la aparición de los hongos., al igual que estar descalzos en las piscinas o duchas públicas.
Una de las dudas que más se hacen las personas que no quieren padecer de hongos en los pies, es cómo empieza el problema. La respuesta es muy simple: al comienzo pican los pies como nunca antes. Incluso, la persona puede llevar un buen tiempo con esta extraña molestia en la zona, pero no darle mucha importancia.
Posteriormente, la picazón se hace más notoria, al punto, que desean llegar a casa para quitarse los zapatos y todo lo que tenga en los pies y, cuando lo hace, percibe que el pie ha perdido su textura, ahora es más rugosa de lo normal y quizás alguna de las uñas tiene un color extraño y poco saludable.
Aunque parezca extraño, esta escena es más común de lo que parece, pues los hongos y el conocido ‘pie de atleta’ suelen presentar dichos síntomas, entre otros más, y en todo caso, la persona que los padece debe recurrir a un tratamiento para eliminarlos.
La salud de las uñas, esencial para los pies
La salud de las uñas es de vital importancia a la hora de cuidar los pies, por ello, no siempre es conveniente pintarlas, se deben cortar bien, que siempre estén rectas para evitar que se claven en los laterales y provoquen dolor e infecciones en la piel de los dedos.
Además, si la persona decide llevar las uñas pintadas, es importante eliminar los esmaltes cada tanto para permitir que las uñas ‘respiren’ y eliminar la posibilidad de que los químicos aumenten el espesor de las uñas, las debiliten y modifiquen su color natural.
Para evitar que la salud de los pies empeore, es necesario aplicarse crema y protector solar tanto en dorso y los dedos de los pies como en el resto del cuerpo, ya que esta zona es propensa a las quemaduras del sol. Aunque se cree que caminar por la orilla de la playa es una buena idea, deja de serlo si no se ajustan las distancias, las capacidades y posibilidades de soportar el esfuerzo de los músculos de los pies al realizar esta actividad.
Si una persona tiene el arco del pie aumentado disminuido, puede padecer molestias y por las cargas musculares mucho antes que las personas que tienen en arco plantar en proporciones normales. Además, es muy importante tener más de un par de zapatos abiertos, ya que se debe permitir un mínimo de 24 a 48 horas de ventilación para poder usar nuevamente el calzado y si este es de piel o de otro material natural, es mejor.
Asimismo, es aconsejable no utilizar calzado de suela plana por mucho tiempo, ya que no brinda la amortiguación necesaria para proteger los pies de los golpes que se dan cuando se camina y este tipo de calzado los pies reciben impactos que pueden generar molestias y dolores que pueden llegar a ser incapacitantes.