Alcaldía de Cali borró mural “Las cuchas tienen razón”; esta fue la explicación

El polémico mural “Las cuchas tienen razón”, ubicado en el puente de La Luna, en Cali, volvió a ser tema de debate, primero fue porque los comerciantes del sector, señalaron que este fue pintado sin respetar los acuerdos, y ahora, este fue cubierto por una cuadrilla de la Secretaría de Infraestructura que lo pintó de gris.

Sin embargo, luego emitieron una comunicado señalando que esto fue por error.

Esta obra, que había sido realizada el pasado 19 de enero en apoyo a artistas de Medellín y madres de los desaparecidos en La Escombrera, estaba sujeta a una restricción y era parte de una mesa de diálogo con los colectivos artísticos.

“Desde la Secretaría de Infraestructura queremos informarle a toda la comunidad que el día de hoy la pintura que se hizo en el puente de La Luna no se encontraba priorizada. Nuestras cuadrillas tienen priorizadas la pintura de bordillos que se estaba llevando a cabo en la zona”, explicó Luz Adriana Vásquez Trujillo, secretaria de Infraestructura de Cali. Además, declaró que las cuadrillas seguirán concentradas en la intervención de la malla vial en la zona urbana y rural.

Asimismo, la administración municipal reiteró su compromiso con el diálogo y anunció que seguirá trabajando desde la Secretaría de Cultura y de Paz y Cultura Ciudadana, en la mesa de una construcción de una política pública de arte urbano gráfico.

“Desde la Secretaría de Cultura y la Secretaría de Paz, invitamos a seguir en la mesa para la construcción de una política pública de arte urbano gráfico, que nos permita rápidamente establecer las normas y los acuerdos de dónde van nuestras libertades y hasta dónde construimos una sociedad para todos”, señaló Leydi Higidio, secretaria de Cultura.

Además, la Secretaria de Paz y Cultura Ciudadana, Johana Caicedo, ratificó su compromiso con el diálogo, por lo que declaró: “Nosotros como administración reconocemos la labor tan importante que hacen los artistas en las Construcciones de paz y reconciliación, por eso queremos seguir reconociendo y trabajando, por eso nuestra invitación es a trabajar en la construcción de la política pública de arte urbano en la ciudad”.

Este grafitti fue el centro de varios altercados, el último se presentó cuando un hombre intentó vandalizarlo y ante la presencia de miembros del colectivo artístico, quienes intentaron detenerlo, este los intimidó con un arma de fuego, hecho que quedó registrado en el lente de El País.