Continúa el asesinato de líderes sociales en el país, un delito muy preocupante

Durante este año una de las preocupaciones fue la violencia contra los líderes sociales del país, personas que por sus liderazgos sufrieron amenazas, persecuciones y en algunos casos la muerte. Según cifras del Instituto para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, entre el 1 de enero y el 21 de diciembre de 2024 se presentaron 172 homicidios a defensores comunitarios en Colombia.

Si bien la cifra muestra una ligera disminución con respecto a 2023, cuando se registraron 188 asesinatos a líderes sociales, continúa siendo alarmante, pues muestra una tendencia que parece difícil de revertir.

El departamento más afectado por este flagelo, como en años anteriores, es el Cauca, donde entre el 19 de enero y el 18 de diciembre de este año ocurrieron 28 asesinatos. Según Juana Cabezas, investigadora de Indepaz, esto puede estar ocurriendo debido a reconfiguraciones armadas que se comenzaron a gestar a finales de 2023 y en el primer semestre de 2024.

Según la experta, en este proceso ocurrieron “rupturas en estructuras armadas que estaban en búsqueda de alguna consolidación territorial, lo que generó el crecimiento de nuevos grupos, las disputas empezaron a ser mayores y a dejar en medio a la población civil”.

Por otro lado, el control de las economías ilegales como el narcotráfico y la minería ilegal hace que quienes están en contra de estos actos sean hostigados y en algunos casos asesinados. En el departamento delinquen el frente Dagoberto Ramos, de las disidencias de las Farc, el bloque suroriental, del Estado Mayor Central, y bandas de carácter local que afectan la tranquilidad de los defensores.

En Cauca, los liderazgos indígenas fueron los más perseguidos, con 12 víctimas, de acuerdo con las cifras de Indepaz. Cabe resaltar que con respecto a 2023 disminuyeron los homicidios, pues en 2023 ocurrieron 10 más que durante este año.

El Valle, conectado con Cauca

De acuerdo con Juana Cabezas, la violencia en el Valle está relacionada con las acciones de grupos armados ilegales en el norte del Cauca. Debido a su cercanía, ese departamento se convierte en un corredor de economías ilegales, dejando una estela negativa.

Entre el 2 de enero y el 21 de diciembre de 2024, en el departamento se registraron 19 asesinatos contra líderes sociales en ocho municipios, lo que representa un aumento con respecto a 2023 cuando se presentaron 16.

“Hay unas disputas muy fuertes en el norte del Cauca que tienen que ver mucho con las dinámicas del sur del Valle, que es una zona muy estratégica. Este es un centro de movilidad en el que, por ejemplo, el Frente 57 se ubica en Jamundí, Pradera y Cali y busca contrarrestar el accionar del frente Dagoberto Ramos y del frente Jaime Martínez, que hacen parte de las disidencias de las Farc”, explicó la investigadora de Indepaz.

Estas dinámicas delictivas generan un escenario de riesgo latente para los defensores que habitan estos territorios. “En el Valle hemos tenido unos asesinatos puntuales que preocupan porque van en contra de liderazgos ambientales, por ejemplo, que defienden territorios que están afectados por la presencia de economías legales e ilegales de explotación”, añadió Cabezas.

Los ataques serían la respuesta de organizaciones armadas ante la desestabilización de sus finanzas por cuenta de quienes defienden a Los Farallones, el sector del Águila, entre otras zonas protegidas. “Ese choque es lo que producen muchas veces los asesinatos y las amenazas”, sostuvo la experta.

Antioquia genera preocupación

Por otro lado, Antioquia, con 26 homicidios, es el segundo departamento más afectado por la violencia contra los defensores sociales.

“Esta zona es el articulador económico, logístico y en algunos casos también político de estas estructuras. La unión con Medellín funciona como un fortín para los grupos armados, por eso se lo disputan, además hay una multiplicidad de grupos, solo en la capital del departamento hay más 200 bandas delincuenciales que están disputándose la zona metropolitana y el centro urbano con organizaciones de Venezuela, entre otras”.

Por otro lado, en la ruralidad el Clan del Golfo se disputa el territorio con el bloque Magdalena Medio de las disidencias de las Farc e incluso con el ELN, afectando a los líderes que buscan proteger a su comunidad.

Las cifras de Indepaz señalan que los liderazgos comunales son los más afectados en Antioquia, con 8 víctimas en 2024. Un dato que resaltó el instituto es que este año se presentó un aumento en el asesinato de defensores sociales, pues en 2023 se registraron 22.