Cómo cerrar los poros de la cara con esta mascarilla casera

La textura del rostro, especialmente los poros abiertos, pueden ser un tema que acompleje a varias personas, y es que, más allá de ser una cuestión estética, podría indicar que posiblemente llegó el momento de prestar atención extra a cada uno de los cuidados que se le da al rostro y a los factores a los que se expone a diario.

Cuestiones como el ambiente, la contaminación, el aire, el régimen alimenticio, el estrés, una mala rutina de limpieza y cuidado de la piel, entre otras cosas, pueden ser los causantes de que la textura del rostro se refleje con mayor notoriedad, por lo que, en un primer momento, es necesario que para el rostro se tenga una adecuada rutina de limpieza, con los productos que son beneficiosos para cada tipo de piel. Para ello, siempre se recomienda acudir a un dermatólogo o experto en el tema.

Sin embargo, hay algunas mascarillas que podrían contribuir a cerrar los poros, y recrear una mejor apariencia en el rostro.

Una de ellas es la mascarilla de miel y avena, la cual se define como una dupla maravillosa para reparar la piel. Por un lado, las propiedades limpiadoras de la avena son las mejores aliadas para remover con eficacia las impurezas de la piel, dejándola libre de bacterias. Mientras que las cualidades astringentes y antioxidantes de la miel sirven para nutrir, hidratar, revitalizar, proteger y calmar el cutis ayudando así a cerrar los poros abiertos.

Obtener sus beneficios por medio de una preparación es muy sencillo, pues solo se necesita mezclar dos cucharadas de avena pulverizada, dos cucharadas de gel de aloe vera fresco, el jugo de media naranja y dos cucharadas de miel. Esos ingredientes se deben revolver hasta obtener una pasta homogénea, la cual se aplicara sobre las zonas que necesitan mayor atención. Se debe dejar actuar por un aproximado de 15 minutos y, después de ello, retirar con agua fría. El último y más importante paso es aplicar la crema hidratante adecuada para cada tipo de piel.

La mascarilla con maicena también es muy reconocida, pues por sus propiedades antisépticas y astringentes la convierten en una de las mejores mascarillas para cerrar los poros, especialmente para las pieles grasas. Lo mejor es que como plus, funciona como un excelente aliado antiedad gracias a su concentración de vitamina E y minerales que le brindan a la piel increíbles propiedades antioxidantes.

Para su preparación se debe mezclar una cucharada grande de maicena con media taza de agua. Esta se debe revolver hasta que se obtenga una pasta ligeramente densa y, finalmente, se debe añadir una cucharada de miel y una de cúrcuma. Una vez que esta mascarilla este lista, se debe aplicar sobre el rostro, previamente lavado con el jabón indicado para la piel, justo en las zonas problemáticas. La mascarilla debe actuar por al menos 10 minutos para evitar que la piel se torne amarillenta. La mezcla se retira con agua fría, y es muy importante sellar con un tónico facial y crema hidratante adecuado.

Otras de las mascarillas reconocidas es la que contiene huevo, que es un ingrediente natural e ideal para reducir la apariencia de los poros, pues, gracias a sus múltiples nutrientes, limpia y desintoxica la piel, brindándole elasticidad, brillo y firmeza.

Su preparación es muy sencilla, se deben mezclar dos claras de huevo, una cucharada de miel y algunas gotas de jugo de limón (que no sean más de 10), de ese modo, aplicar sobre el rostro con ayuda de una brocha y esperar a que seque. Se deja actuar durante 15 minutos y se retira con abundante agua tibia o fría. Finalmente, y muy importante, se debe aplicar un sérum nutritivo y crema hidratante adecuado para la piel.