La fruta que ayuda a reducir el colesterol y a mejorar la circulación de la sangre

Son muchas las medidas que se pueden tomar en busca de mejorar la circulación y evitar así las molestias y los trastornos asociados este padecimiento.

La idea es poder activar la circulación de forma natural y evitar esos intensos dolores que muchas veces se presentan.

Una de esas medidas es tener una sana alimentación, que aporte con la circulación, y para lograrlo es fundamental evitar los azúcares y las harinas refinadas, los tóxicos, hidratarse bien y evitar las bebidas con gas.

Según la medicina oriental, los alimentos de naturaleza caliente, como las carnes, el café y el alcohol, son aquellos que favorecen la obstrucción, por lo que hay que tener mucho cuidado con su consumo.

En cambio, aquellos alimentos que, por sus propiedades antioxidantes, venotónicas y antiinflamatorias, pueden ser de gran ayuda para prevenir los problemas circulatorios, son aquellos que siempre deben estar presentes en la alimentación.

Una fruta poderosa

La vitamina C del limón es fundamental, ya que con ella interviene en la formación de colágeno y elastina, proteínas que influyen en la pared capilar.

El limón también se caracteriza por su alto contenido en fibra, agua y potasio, motivo por el cual es un gran aliado para el sistema inmunológico, el cual fortalece el sistema circulatorio, protegiéndolo contra las enfermedades cardiovasculares y los problemas en la sangre.

Tomar el zumo de un limón en un vaso de agua tibia por la mañana, antes del desayuno, es ideal, aunque también puede aliñar sus verduras con el zumo de limón.

La piel también puede ser aprovechada rallando un poco de ella, y al llegar a la parte blanca obtendrá aún más antioxidantes.

Cabe mencionar que a esta fruta además se le relaciona con efectos positivos, sobre todo cuando alguien presenta presión arterial sistólica, es decir, cuando se contrae el corazón

Otros alimentos que puede consumir para evitar la mala circulación

La cúrcuma

Es un antiinflamatorio fácil de usar. Los beneficios que tiene para la circulación son debido a su efecto antioxidante, que contrarresta la acción de radicales libres y tóxicos en el organismo.

Lo recomendable es consumir dos rodajas de la raíz fresca al día en una infusión, smoothie, crema o salsa, siempre con pimienta negra y un poco de aceite.

Esta infusión es recomendada para la circulación de las piernas.

Jengibre

Su consumo frecuente ayuda a movilizar la energía y activa la circulación de la sangre. Lo mejor es consumirlo fresco o seco a diario en salsas, cremas de verduras, dulces o infusiones.

Pepas de girasol

Aportan aminoácidos esenciales necesarios para el mantenimiento de las estructuras capilares, además son ricas en vitamina E, considerada uno de los antioxidantes más potentes para el organismo.

La recomendación es consumir 1 cucharada al día de semillas de girasol, las cuales pueden estar ligeramente tostadas o remojadas 12 horas y deshidratadas.

Ajo

Es un anticoagulante natural que ayuda a que la sangre circule mejor en los vasos. Junto a la cebolla, estimula la circulación sanguínea y disminuye la viscosidad de la sangre. Lo ideal es tomar a diario un diente crudo machacado.

La cola de caballo

Es rica en silicio, necesario para la formación de colágeno y, por tanto, el mantenimiento de las paredes vasculares. Puede tomar dos tacitas en infusión, trate que la planta sea molida.

Otra opción es tostar la cola de caballo y añadirla a las ensaladas y a las cremas de verduras.

Arándanos

Los arándanos son ricos en antioxidantes y, junto a la vitamina C ayudan a mejorar el tono venoso. Lo recomendable es tomar un puñado al día de arándanos, solos o en platos como una ensalada.

Nueces

Aportan omega-3, ácidos grasos necesarios por su efecto antiinflamatorio, además de vitamina B3, que por su efecto vasodilatador favorece la circulación y el retorno venoso.

Puede disfrutar de un puñado de nueces al día ligeramente tostadas o remojadas unas horas.

Estimule la circulación

Según la Medicina Tradicional China, para gozar de una correcta circulación sanguínea se necesita del chi o energía de bazo e hígado.

Lo que se necesita es que exista suficiente energía de bazo para que la sangre circule bien por los vasos sanguíneos. Si hay toxicidad acumulada, las venas pueden perder elasticidad.

Para evitar la mala circulación es necesario también cuidar el sistema linfático, sobre todo porque recoge a través de la linfa buena parte de los residuos que circulan por la sangre.

Lo que cada persona debe hacer es realizar ejercicio, ser activo, evitar el estreñimiento, elevar las piernas al descansar y usar técnicas de hidroterapia para mejorar la circulación.