Las 5 recomendaciones de expertos para limpiar sus dientes correctamente

Mantener una buena higiene es una de las principales preocupaciones de muchas personas a lo largo de sus tareas cotidianas. Buenas prácticas en este sentido ayuda a prevenir enfermedades comunes como la caries y otras que se pueden presentar en las encías.

Como la acción más importante y central dentro del cuidado dental está el cepillarse. Durante el cepillado se eliminan los restos de alimentos y la placa bacteriana que se acumulan en los dientes.

La placa es una película pegajosa compuesta por bacterias y azúcares que produce ácidos que pueden dañar el esmalte dental y causar caries. Al cepillar correctamente, se reduce la presencia de placa y se disminuye el riesgo de desarrollar caries.

También, al eliminar la placa y mantener una higiene oral adecuada, se reduce el riesgo de desarrollar enfermedades que pueden llevar a la pérdida de dientes. Cuidar adecuadamente estas herramientas naturales que facilitan sobre todo la nutrición como función esencial, evita la necesidad de tratamientos costosos y restauraciones dentales.

Una higiene oral deficiente puede contribuir al mal aliento. Las bacterias que se acumulan en la boca y en los dientes pueden generar compuestos volátiles de azufre, que causan un olor desagradable. Al cepillarse los dientes, se remueven las bacterias y los restos de alimentos, lo que ayuda a mantener un aliento fresco y agradable e incluso genera confianza en los procesos de socialización.

De hecho, la salud bucal está estrechamente relacionada con la salud en general. Se ha demostrado que las enfermedades bucales, como la enfermedad de las encías, están asociadas con problemas de salud más graves, como enfermedades cardíacas, diabetes y complicaciones durante el embarazo.

De allí la importancia de que esta actividad recomendada por lo menos tres veces al día, después de cada una de las comidas principales, se lleve a cabo de la mejor manera posible previniendo también que la mala ejecución de técnicas de cepillado puedan interferir con el bienestar de los dientes causando desgaste en sus cuellos, decoloración u otro tipo de complicaciones.

Consejos para cepillarse adecuadamente

Expertos recomiendan tener en cuenta unas recomendaciones básicas a la hora de asear los dientes a diario. Entre las más importantes están:

1. Elegir el cepillo y la pasta adecuados: un cepillo de dientes de cerdas suaves y una pasta dental con flúor son las mejores para utilizar siempre. Las cerdas suaves son más amigables con los dientes y encías, evitando daños innecesarios, mientras que la pasta con flúor fortalece el esmalte dental y ayuda a prevenir las caries. Se recomienda por higiene y usabilidad reemplazar el cepillo cada tres meses o cuando las cerdas se desgasten.

2. Técnica de cepillado adecuada: es importante adoptar una técnica de cepillado correcta para asegurarse de limpiar todas las superficies de los dientes. Hay que colocar el cepillo en un ángulo de 45 grados hacia las encías y realizar movimientos suaves y circulares. Con esta técnica hay que pasar por todas las caras de los dientes: la parte frontal, posterior y la superficie de masticación, prestando especial atención a la línea de las encías, donde frecuentemente se acumula la placa bacteriana.

3. No olvidar la lengua: muchas bacterias se alojan en la lengua y pueden contribuir al mal aliento. Después de cepillar los dientes se utiliza el mismo cepillo o un raspador de lengua para limpiar suavemente su superficie. Esto ayudará a mantener un aliento fresco y eliminar las bacterias que causan el mal olor.

4. Tiempo de cepillado adecuado: hay que dedicar al menos dos minutos a cada sesión de cepillado dental. Este tiempo asegurará una limpieza completa y efectiva. Se puede dividir en secciones, dedicando al menos 30 segundos a cada cuadrante de la boca.

5. Complementar con hilo dental y enjuague bucal: el cepillado por sí solo no es suficiente para limpiar todas las áreas de la boca. Usar hilo dental diariamente sirve para limpiar entre los dientes y alcanzar las áreas de difícil acceso. También se puede utilizar enjuague bucal para eliminar bacterias adicionales y refrescar el aliento.

De la mano de estos hábitos es importante también consultar al dentista por lo menos cada seis meses para hacer revisiones más detalladas y evitar la aparición de complicaciones.