Tenga en cuenta la recomendación; neurocientífica aconseja tres cosas que debe dejar de hacer para cuidar su cerebro

La salud humana depende, en gran medida, de los alimentos que se consumen, pues lo que ingresa al cuerpo le permite tener vitaminas y minerales necesarios para el correcto funcionamiento del organismo. Sin embargo, otros factores como una respiración controlada o rutinas físicas sanas también contribuyen a que se mantenga un buen estado.

No obstante, el cerebro, que es el órgano rector, también influirá mucho en lo que se logre. Los pensamientos, la carga de actividad y las emociones juegan, en ese orden de ideas, un papel importante.

Es en ese sentido que la salud mental y la física convergen. Y es que ese conocimiento ha sido cada vez más explicado por profesionales de la salud, quienes recomiendan usualmente a sus pacientes en tratar ambos aspectos, a fin de evitar que los problemas de uno, afecten al otro, como suele pasar cuando hay desórdenes de algún tipo.

Teniendo eso en cuenta, la joven Emily McDonald, conocida en TikTok como @emonthebrain, dedica su tiempo y su cuenta en esta red social a compartir consejos sobre salud. Sus recomendaciones son avaladas por el título profesional y de maestría que tiene en Neurociencia. Además, tiene experiencia laboral asesora y coach.

En uno de sus videos más recientes, la estadounidense reveló tres tips para cuidar el cerebro. A través de acciones sencillas, la salud de esta parte del cuerpo puede verse grandemente beneficiada, de acuerdo a lo que expresó.

El primer aviso que dio tiene que ver con el uso de los dispositivos móviles. Una de las costumbres más comunes para muchos es revisar las redes sociales al despertar, como primer punto en la agenda del día. A esto, McDonald reaccionó.

“Cada vez que te despiertas por la mañana tus ondas cerebrales pasan de zeta a alfa, lo que significa que nuestro subconsciente está en un estado más programable, el contenido que consumes durante este tiempo tendrá un mayor impacto en su forma de pensar y estropea nuestra dopamina por el resto del día”, indicó.

Por otra parte, se pronunció en contra de aquellos que son demasiado exigentes consigo mismo o que no han desarrollado amor propio. El estrés, la ansiedad, la desconfianza y hasta la depresión pueden venir por vía de este pensamiento auto flagelante.

“Lo que te dices a ti mismo importa, y cuanto más lo pones en tu cerebro, más se conecta, y lo que está conectado, es lo que manifestamos”, añadió.

Finalmente, lo último en lo que hizo énfasis fue en la premisa con la que se abrió este artículo, que es la importancia de una alimentación saludable.

“Hay mucha ciencia ahora para respaldar que lo que comes afecta tu cerebro. Los alimentos altamente procesados provocan el envejecimiento del cerebro, y no queremos eso”, expresó.

Pero es que sobre este último punto no es solo la neurocientífica de Arizona la que se ha expresado. De hecho, la Organización Mundial de la Salud hizo hincapié en lo mismo en un comunicado reciente.

“Llevar una dieta sana a lo largo de la vida ayuda a prevenir la malnutrición en todas sus formas, así como diferentes enfermedades no transmisibles y trastornos. Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en los estilos de vida han dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios. Actualmente, las personas consumen más alimentos hipercalóricos, grasas, azúcares libres y sal/sodio; por otra parte, muchas personas no comen suficientes frutas, verduras y fibra dietética, como por ejemplo cereales integrales”, explicó la OMS.

Términos como estrés oxidativo, bienestar cuerpo-mente o las ondas alfa son cada vez más comunes en las recomendaciones de los médicos, denotando la importancia entre equilibrar el cuidado del cuerpo y la mente.