La Misión de Observación Electoral, MOE, realizó un balance de la violencia sufrida por líderes políticos en lo que va corrido del año, en el marco de las próximas elecciones electorales del Congreso de la República y la Presidencia.

Según el balance, la violencia contra líderes políticos ha aumentado un 15,7 % en comparación al primer semestre del año 2020; se han registrado 247 hechos de violencia.

Los líderes sociales aún continúan siendo los más vulnerados, ocupan un 52 % de los hechos violentos con 128 casos registrados. El 54 % de los asesinatos a líderes registrados fueron en territorios de las circunscripciones especiales de paz.

Para la entidad es preocupante el aumento del 106 % en los hechos letales contra líderes políticos y sociales en lo que va corrido del 2021. Un tercio de los hechos se dieron en departamentos como el Cauca, Antioquia y Valle del Cauca con un 76 % del total de casos registrados, además la violencia también aumentó significativamente en los departamentos de Cesar y Nariño.

“Estas cifras resultan preocupantes, pues son evidencia del aumento acelerado en los patrones de violencia. Por lo que la situación debe ser señal de alarma para las autoridades, de cara al cierre del 2021 y a los procesos electorales del 2022. Es de resaltar que la MOE ha sido enfática en la existencia de una relación entre la violencia contra los liderazgos y los hitos del calendario electoral”, afirmó Alejandra Barrios, directora de la MOE.

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Según Pamela San Martín, coordinadora de la investigación, esta situación debe tener una intervención urgente de las autoridades con el fin de proteger la vida de los líderes y políticos de todo el país.

También resaltó que se deben tener en cuenta las regiones que pertenecen al Plan de Desarrollo con Enfoque Territorial, Pdet, debido a que en 15 de estos territorios hubo el 54 % de asesinatos registrados en el país.

“Es necesario tener en cuenta que los candidatos a la Cámara de Representantes para las Circunscripciones Transitorias Especiales de Paz, Ctep, surgirán de las diferentes organizaciones y liderazgos sociales que operan en el territorio. Siendo necesario que con miras al proceso electoral se adopten medidas interinstitucionales dirigidas a garantizar las condiciones de seguridad para su participación en la política electoral”, enfatizó la directora de la MOE.

Los líderes políticos sufrieron el 42 % de los hechos, el 33 % fueron asesinatos y el 50 % atentados, estas cifras concentran un total de 103 vulneraciones. Los liderazgos indígenas tuvieron un total de 37 agresiones de las cuales el 37 % fueron letales.

Respecto a los líderes comunales, se presentaron 16 hechos de violencia y la mitad corresponden a asesinatos y atentados. En liderazgos de la comunidad Lgbti, pasaron de cero agresiones en 2019, a dos en 2020 y cuatro en 2021, dos de estas fueron asesinatos.

“Este contexto enciende las alarmas para el último mes del 2021, en que tiene lugar el inicio de la propaganda electoral en espacio público y en medios de comunicación social, lo que pone a los candidatos al Congreso de la República en un contexto de mayor visibilidad y, por ende, de mayor riesgo. Panorama que también tendrá lugar en el 2022”, afirmó Diego Rubiano, subcoordinador del observatorio a cargo de la investigación.

Para la MOE es primordial que el Gobierno Nacional tome medidas respecto a esta situación. “Resulta necesario fortalecer la intervención del Ministerio Público en las investigaciones penales sobre hechos de violencia contra líderes y lideresas, a fin de garantizar el debido proceso y fortalecer, transparentar y democratizar el debate judicial”, concluyó Mauricio Vela, coordinador del observatorio.