Los ejercicios físicos que ayudan a bajar la presión arterial

La presión arterial es una medición de la fuerza ejercida contra las paredes de las arterias a medida que el corazón bombea sangre al cuerpo humano, según explicó el servicio informativo en línea de salud, Medline Plus. De hecho, cuando la presión arterial está elevada, frecuentemente se le denomina hipertensión.

A la presión arterial también se le presta atención, incluso, su control está relacionado con la realización de unas lecturas, por medio de las que se conocen los niveles exactos. En algunos casos, los profesionales de salud deciden ordenar medicamentos para que esté controlada la presión.

Estas lecturas arrojan dos números, uno ubicado en la parte superior que se conoce como presión arterial sistólica y el de la parte inferior, es el de la presión arterial diastólica. Una cifra de 120 sobre 80 (escrito como 120/80 mm Hg) se considera que está dentro de rangos normales.

De otro lado, cuando se presentan niveles elevados de manera frecuente, cabe espacio para pensar que la persona está sufriendo de hipertensión, por lo que el médico acostumbra a enviar un ‘afinamiento’ con el que se define si ese es el diagnóstico. De ser el caso, esta enfermedad se tiene que controlar con medicamentos.

Sin embargo, algunas personas optan por tomar bebidas ‘milagrosas’ o consumir algunos medicamentos, frutas y verduras, que prometen ser poderosos ‘aliados’ para controlar la presión arterial. Y es allí también cuando aparece el saber de la abuela, esos famosos consejos que solucionan los ‘dolores de cabeza’ y en este caso le ponen ‘freno’ a la hipertensión.

En este caso, la revista especializada ‘British Journal of Sports Medicine’ publicó un estudio en el que se reveló la actividad física capaz de prevenir y tratar la presión arterial alta o la hipertensión.

Así las cosas, este estudio indicó, según Semana, que los “ejercicios para el fortalecimiento de los músculos por contracción o isometría como las sentadillas con apoyo en la pared o la posición en plancha sostenida” son algunos de los ejercicios que ayudan a disminuir la presión arterial.

Cabe añadir que los profesionales de salud también recomiendan ejercicios físicos como correr, caminar y montar en bicicleta, entre otros, para mantener regulada la presión sanguínea. Pero estos hallazgos entregan más posibilidades de regular la presión.

Para el análisis se realizaron varias pruebas con 16.000 personas, las cuales hallaron que todo tipo de ejercicio es bueno para bajar la presión arterial. No obstante, el ejercicio aeróbico tiene más poder en este tema.

“En general, el entrenamiento con ejercicios isométricos es el modo más efectivo para reducir la presión arterial sistólica y diastólica”, aseguró el doctor Jamie O’Driscoll, el coautor del estudio, según citó SEMANA.

O’Driscoll, quien, además, es profesor de fisiología cardiovascular en la facultad de Psicología y Ciencias de la Vida de la universidad Christ Church de Canterbury en Inglaterra, explicó que “estos hallazgos brindan un marco integral basado en datos para respaldar el desarrollo de nuevas recomendaciones de pautas de ejercicio para la prevención y el tratamiento de la hipertensión arterial”.

Así también se puede disminuir la presión

Es cierto que existen varias maneras por medio de las que se puede bajar la presión arterial alta, por lo que es fundamental hablar de algunos poderosos batidos naturales.

Los jugos más efectivos para bajar la presión arterial es el de tomate, el de remolacha, el de ciruela, de granadillas y de bayas; este último, al igual que los arándanos, contiene antioxidantes y podrían mejorar los niveles.

A esa lista se suman los productos lácteos bajos en grasa como el yogur y la leche descremada, el té verde y el té negro. Cabe anotar que incluir las bebidas mencionadas anteriormente, en la mayoría de los casos, serían unos ‘aliados’ perfectos para mantener la presión arterial dentro de los niveles normales y evitar enfermedades como la hipertensión, la cual la padecen millones de personas en el mundo. Eso sí es importante tener en cuenta las recomendaciones médicas.