SALUD
Los efectos que tiene el consumo de naranjas en la circulación sanguínea
Cuando una persona sufre de mala circulación puede presentar múltiples síntomas.
Acciones como dejar de fumar, reducir la ingesta de grasas saturadas y tratar de no permanecer sentado por períodos prolongados son claves para mejorar la circulación, de acuerdo con el medio especializado Medical News Today.
Una fruta que puede ayudar en este propósito es la naranja. Este alimento es rico en vitamina C, lo que ayuda a la circulación sanguínea. En concreto, las propiedades de esta fruta fortalecen las paredes capilares con la intervención en la formación de colágeno y elastina.
Este fortalecimiento evita la acumulación de placas en la sangre y facilita su recorrido por todo el organismo y el retorno venoso, según el portal Venoruton en su sección de salud y bienestar.
Se recomienda tomar un vaso de jugo de naranja diario con naranjas exprimidas, al ser natural el poder de sus vitaminas es mucho más fuerte.
Ejercicios para mejorar circulación
De acuerdo con el portal web español Tu Canal de Salud, estos son algunos de los mejores ejercicios para mejorar la circulación en las piernas:
Levantar y ejercitar las piernas
Este ejercicio consiste en elevar las piernas, usando un pequeño escalón de 20 centímetros de altura mientras se permanece sentado en el lugar habitual de trabajo. Una vez en esa posición, se deben realizar movimientos circulares con los tobillos o de flexión y extensión.
Esto se debe hacer durante 5-10 minutos, realizando dos series de 15 repeticiones.
Caminar de puntillas
Caminar en puntas de pies estimula la contracción de los gemelos; este movimiento, al mismo tiempo, comprime las venas, facilitando el retorno sanguíneo por las venas. Este ejercicio se denomina bomba muscular, movimiento que influye significativamente en la circulación de las piernas.
Masaje muscular
Al activar los músculos de las piernas, estos realizan un “masaje” sobre las venas que colaboran en el retorno venoso y en una buena circulación. Recostado boca arriba con las piernas flexionadas. Luego hay que llevar las rodillas hacia delante, elevando la pelvis.
Seguido de esto se deben apretar los glúteos, mantener las piernas fuertes y los pies bien apoyados. Para que el ejercicio genere mejores resultados, lo ideal es aguantar cinco segundos; finalmente hay que bajar despacio y repetir tres veces.
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