Ronquera: ¿cuándo es más que una simple molestia?

La ronquera, también conocida como disfonía, es un cambio en la calidad de la voz que puede manifestarse como una voz rasposa, áspera o débil. Este síntoma es común y puede afectar a personas de todas las edades, siendo especialmente prevalente entre aquellos que usan su voz de manera profesional, como cantantes, profesores o conferencistas.

Si bien la ronquera a menudo es temporal y se resuelve por sí sola, existen casos en los que puede ser indicativa de problemas de salud más serios.

Causas comunes de la ronquera

La mayoría de las veces, la ronquera es causada por una inflamación de las cuerdas vocales, a menudo debida a infecciones virales del tracto respiratorio superior, como el resfriado común o la gripe. Otros factores incluyen el uso excesivo de la voz, como gritar o cantar por períodos prolongados, y la exposición a irritantes como el humo del tabaco y otros contaminantes ambientales.

Además, la ronquera puede ser causada por reflujo gastroesofágico, una condición en la que los ácidos estomacales se desplazan hacia el esófago y, ocasionalmente, hacia la laringe, irritando las cuerdas vocales. Las alergias, la sequedad en el ambiente y ciertos medicamentos también pueden contribuir a la aparición de la disfonía.

¿Cuándo preocuparse por la ronquera?

Aunque la mayoría de los episodios de ronquera son benignos y temporales, hay situaciones en las que este síntoma puede ser un signo de una condición más grave. Se recomienda buscar atención médica si la ronquera persiste por más de dos semanas, especialmente en ausencia de una infección respiratoria reciente.

Entre las condiciones más serias que pueden causar ronquera prolongada se incluyen:

• Nódulos, pólipos y quistes vocales: Estas son lesiones benignas en las cuerdas vocales que resultan del uso excesivo de la voz. Pueden requerir tratamiento médico o quirúrgico.
• Cáncer de laringe: La ronquera persistente es uno de los primeros síntomas del cáncer de laringe. Es crucial que cualquier persona con una ronquera inexplicada y persistente sea evaluada por un especialista para descartar esta condición.
• Parálisis de las cuerdas vocales: La parálisis de una o ambas cuerdas vocales puede ocurrir debido a daño en los nervios que controlan las cuerdas vocales. Esto puede resultar de una cirugía, un traumatismo, una infección viral o una condición neurológica.

• Enfermedades sistémicas: Algunas enfermedades como el hipotiroidismo, la artritis reumatoide y otros trastornos autoinmunes pueden afectar la voz. En estos casos, la ronquera es un síntoma de una condición subyacente más amplia.

Diagnóstico y tratamiento

El diagnóstico de la causa de la ronquera generalmente comienza con una historia clínica detallada y un examen físico. El otorrinolaringólogo puede utilizar un espejo laríngeo o un endoscopio flexible para visualizar las cuerdas vocales y determinar la causa de la disfonía. En algunos casos, pueden ser necesarias pruebas adicionales como la videolaringoestroboscopia, que proporciona una visión detallada del movimiento de las cuerdas vocales.

El tratamiento depende de la causa subyacente de la ronquera. Para la disfonía causada por infecciones virales, se recomienda el descanso vocal, la hidratación adecuada y, en algunos casos, la terapia de voz con un fonoaudiólogo. Si la ronquera es causada por reflujo gastroesofágico, puede ser necesario un cambio en la dieta y el uso de medicamentos para reducir la acidez estomacal.

En el caso de lesiones benignas en las cuerdas vocales, como nódulos o pólipos, la terapia de voz suele ser el primer paso, y en algunos casos, se puede requerir cirugía. Para la parálisis de las cuerdas vocales, las opciones de tratamiento incluyen la inyección de materiales para aumentar el volumen de la cuerda vocal afectada o la cirugía para reposicionar las cuerdas vocales.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.