Columnistas
Día de la naranja ombligona
El próximo 11 de julio será el Día Mundial de Brindar por la Soledad, así que puede escucharse, sin cesar, ese bolero que tanto gustaba a María Mercedes Carranza.
Después de celebrar el Día de los Ajíes Dulces, celebración que sucedió al de la Naranja Ombligona y la Flor de la Canela, me di cuenta de que hubo un tiempo en que los días especiales eran para la madre, el padre, el maestro, la secretaria, y pare de contar.
Ah, claro, la Independencia de Cartagena, el Corpus Christi y no me acuerdo cuál otro, pero en los pueblos se desfilaba con banda de guerra -toqué el tambor en mi colegio- pero existía memoria de esos días consagrados a un momento especial.
No sé quién decreta o consagra hoy los días a un evento específico, pero estoy por creer que existe un diablillo en las redes que echa a rodar en enjundio y en minutos todos repiten: Feliz Día de la Piña Madura, felicidades a las solteronas en esta fecha tan especial, felicitaciones a los Cargueros de Semana Santa, muchas venturas hoy al Correveidile, fiestas y más fiestas para esta ocasión que consagra el Día de la Piñuela, loor al Camillero en este tiempo y que lo disfrute.
Como vamos, celebraremos pronto el Día del Lavaperro, la fiesta del Sapo en Tomatera, los juegos florales del Pez que Fuma y la primavera azul de la sirena viene hacia mí.
El Día del Consolador de Legendarias ya pasó, y fue una invención de David Sánchez Juliao. Alistémonos pues para la celebración de la Nutria de Río, ahora que se dejan ver en las orillas del Cali y pongamos cúpula de hierro a celebraciones de otros lugares que traerían caos y dolor al lar nativo. En Noruega y países nórdicos, por ejemplo, cuando se acerca diciembre celebran el Día de Esconder las Escobas, con la intención de ahuyentar las brujas. Esto que parece venial, viene acompañado no obstante de algo que sería tenaz en Colombia, cuál es el hecho de disparar por las ventanas a medianoche para ahuyentar los malos espíritus.
En la república Checa existe el Día de la Tirada del Zapato, entre las solteras. La mujer que presiente pronto le tocará ‘vestir santos’, sale a la puerta de su casa, de madrugada, y tira un zapato a la calle por encima del hombro. Si este queda con la punta mirando hacia la puerta, significa que más temprano que tarde encontrará un hombre amantísimo, honrado, responsable, que la cuidará hasta el final de sus días. Si, por el contrario, el zapato cae en la calle con la punta hacia afuera, esto traduce que su soltería se prolongará un tiempo y como en el juego de lotería algo le dice ‘sigue intentando’. Lo peor de esta celebración ocurre cuando el tacón hace un giro en el aire y checa en la cabeza de un checo. Da cárcel, como ocurre hoy en el sur del Italia con quienes persisten en la tradición del Armario a la Calle, fiesta de año nuevo que permite tirar desde los balcones sillas, nocheros y armarios viejos al físico asfalto, sin mente, sin pensar en la monja que en ese momento remonta el adoquín con su misal de nácar.
Muchos hoy no saben que el 22 de enero es el Día Mundial de Responder Preguntas a tu Gato, el cual consiste en hacerse el pendejo y simular que tienes un diálogo real con un felino doméstico.
El pasado 6 de marzo se celebró el Día Mundial del Pelo, el cual tiene su contraparte cada 7 de octubre: Día Mundial de los Calvos. Los 7 de septiembre están consagrados a un tiempo que parece patentado por el Príncipe Harry; es el Día Mundial del Pelirrojo.
Como si ello fuera poco, la tradición sintoísta venera la fertilidad cada año en la ciudad de Komaki, Japón, y da rienda suelta a una fiesta que está protagonizada mayoritariamente por mujeres: el Día Mundial del Pene. La ciudad se llena de objetos, pasteles, artesanías, todo en forma de chirolo, sin contar que desde una pagoda se realiza un desfile con un bonitico de dos metros y medio, tallado en madera. Los juegos florales del pene son conocidos en japonés como ‘Kanamara Matsui’.
El próximo 11 de julio será el Día Mundial de Brindar por la Soledad, así que puede escucharse, sin cesar, ese bolero que tanto gustaba a María Mercedes Carranza, y el 12 de agosto, ojo, será el Día Mundial del Hijo del Medio, fiesta que me atañe, y el 9 de septiembre, un festejo que nos recuerda un poco el filme ‘Singing in the rain’: Día Mundial de Saltar Charcos. Así que, a dejar el carro en casa -ojalá llueva- y a brincar por las calles como canguro pedaleado.